El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
Blog
jueves, 31 de diciembre de 2015

La escribana del reino:
"Escritos atemporales"




La Escribana del Reino, Mª. Elena Valbuena, publica un nuevo libro.
Compartimos para todos nuestros internautas una noticia agradable e importante para este BLOG y para el T.E. de León. Una de nuestras colaboradoras más asiduas, María Elena Valbuena, acaba de publicar el libro "La escribana del Reino. Escritos atemporales", a través de la Editorial Monte Carmelo.
La propia autora nos manifiesta que su objetivo ha sido éste: Escribir desde los detalles me ayuda a contemplar. Contemplar me ayuda a comprender. Comprender me ayuda a vivir. Y vivir es para lo que estamos aquí. De eso se trata. Y esto es lo que ofrecemos: un libro de compañía, de esos que se leen a ratos, que acompañan a nuestros quehaceres, que ayudan a pensar. Escritos que ponen el acento en los detalles de la vida, los momentos que hacen que nuestro discurrir diario sea diferente, más vivo y más rico, presentados a través de una palabra limpia, transparente. Escritos atemporales, como atemporales son las enseñanzas".
La fotografía del libro es de Jesús Aguado, voluntario también del Teléfono de la Esperanza, igual que la autora, y colaborador asiduo de este BLOG.
El prólogo ha sido realizado también por diversos colaboradores de este medio y frecuentes lectores de la propia autora. De él extraemos algunas frases:
"Sus artículos están escritos para ser entendidos por cualquier persona, al exponer sus propias vivencias –que pueden ser las de todos– y transmitiendo a la vez extraordinarias enseñanzas, sin dar consejos. Desde el principio me despertaron mucho interés y, actualmente, para mí son lo mismo que si una amiga me escribiera todas las semanas, contándome múltiples y variadas situaciones que le van sucediendo en su vida, expresando sus emociones: alegría, tristeza, rabia, desencanto, aceptación, esperanza, ilusión, paz, serenidad, impotencia… " (Pepi)
"La Escribana, cada domingo, desde lo que va sintiendo en su vida, tiene la capacidad de conectar con los que la leen, sin maquillajes. Cuando toca llorar, llora; cuando toca reír, ríe; cuando toca rebelarse, se rebela o se indigna... " (Manoly)
A todo lo que ocurre, que ve con los ojos físicos, pero sobre todo a través de los ojos del corazón y que de un pequeño hecho cotidiano, de un pequeño detalle de la vida –que a muchas personas nos pasaría desapercibido– es capaz de llegar a transmitir un mensaje, a veces una moraleja, que llega a despertarnos, a darnos un toque de atención, a cuestionarnos y a hacernos reflexionar sobre qué es lo que estamos haciendo, qué podemos hacer para ir creciendo como personas, para sentirnos más a gusto con nosotros mismos, para poder ser, en definitiva, más felices. Es como que tuviera un cofre lleno de piedras preciosas y cada día, cada domingo, nos fuera regalando una. (Javi)
El libro se puede adquirir en librerías al precio de 13,50 euros, pero animamos a nuestros lectores a que lo adquieran en el Teléfono de la esperanza de León y así los beneficios del libro quedarán para la propia ONG.
miércoles, 30 de diciembre de 2015

Cena de Navidad…

Yolanda Gonzalo

Cena de Navidad… comida de Navidad… menú 1…, menú 2…, lugar… etc,  diversas opiniones…. A mi modo de ver poco importa el DONDE?, el CUANDO? y el QUE? se come. Donde yo pongo la atención es en el CON QUIEN? 
Ya sé que hay gente que disfruta mucho de una buena comida, en un buen restaurante y eso está muy bien, yo también puedo apreciarlo, sobre todo un buen postre... Pero para mi el aliciente es la compañía, por eso cuando la respuesta al último interrogante es: CON GENTE DEL T.E., mi manjar ya está servido…, sé que voy a salir del restaurante plena, satisfecha y con más energía.
Y es que los que hemos pasado por el T.E., quien más quien menos, todos hemos sufrido… como todo el mundo, nada nuevo… pero no todo el mundo ha tenido la suerte de poder hacer un trabajo personal como el que se realiza en nuestros talleres, grupos y cursos dirigidos por coordinadores que nos ayudan a descubrir, triturar, masticar, tragar, digerir y dejar atrás lo que no sirve, para luego volver a la vida con otra mirada… con otra forma de ver… y “eso” se nota en estas reuniones y es lo que hace que yo me sienta tan a gusto con vosotros.
Y así resulto para mí la comida del domingo 20 de diciembre,  disfruté del encuentro, de los saludos, los abrazos, la sobremesa, el baile y la animada charla de los que alargamos la comida para convertirla casi  en cena. También eche de menos algunas compañeras-os a los que aprecio mucho.
Momentos agradables como estos que se repiten en Navidad con nuestros amigos, nuestra familia, nuestros compañeros,  son los que alimentan nuestro espíritu, que se vuelve navideño y que tendría que durar todo el año.
Leí no sé donde… lo que escribió no sé quien… que decía: “Adoro a la gente detallista, no de comprar regalos,  sino de regalar momentos”.
Gracias por este regalo y FELIZ NAVIDAD PARA TODOS.
martes, 29 de diciembre de 2015

El Teléfono de la Esperanza con los ancianos

Germán
Nota redacción: nos ha llegado a la redacción la reflexión de cómo Germán ha vivido este Grupo que realizamos en una residencia de Ancianos de León. Mantenemos su estilo y su forma, porque así es más auténtico.


ANTECEDENTES DE ESTE ANSIADO...CURSO...

Ahora más que nunca,  una vez terminado el curso DE AFRONTAMIENTO DE LA VEJEZ y a finales de este año 2015,
puedo decir con orgullo y satisfacción (sin coronarme por ello),
que tengas la edad que tengas...HOY te toca ser feliz...

PARA  DISFRUTAR (en este caso) DE TU ANCIANIDAD...

pero lamentablemente no siempre fue así, hubo un tiempo (no tan lejano) en que no estaba para pensar de lleno en los demás (el teléfono me ayudó de verdad...y no me refiero al móvil del bolsillo) ...

porque además  tenía la rabiosa sensación de correr contra todo y en contra de todos ...río arriba... incluso en contra de mi salud neurológica, mental y psicoemocional...  en ese riguroso y peligroso orden... pues bien...

TODO EMPEZÓ en una reunión del equipo multidisciplinar de la residencia de tercera edad...en mayo de 2015,

donde dar un carpetazo en la mesa significó decir¡¡¡ basta ya¡¡¡...

de conformismos, de impotencias, de mirar para otro lado ante la cruda realidad existente en el centro, cuando se derivaban todos los casos a la saturada y salvadora seguridad social... cuando...

siempre se podía hacer algo más, siempre se podía llevar a cabo un plan de intervención y un proyecto pionero... aunque no hubiera antecedentes al respecto... CUANDO EL NO YA LO TIENES COMO RESPUESTA SIEMPRE  ES ESO CON LO QUE TE ENCUENTRAS PRIMERO...
pues bien...
no había departamento de psicología en el centro de tercera edad y la morbilidad psicoemocional en él era demasiado alta como para ignorarla, desde entonces decidí que en vez de luchar por el confort del anciano, abogar por la felicidad del paisano...
y así de esta forma, paliar la parte de la salud que tanto se obviaba, que tanto se delegaba fuera del centro pero que tanto influía día a día en el anciano presente ...y que en sí misma se convertía en una competencia más del equipo multidisciplinar de trabajo...

EL AFRONTAMIENTO DE LA VEJEZ...

Por mi parte y en mi soledad como terapeuta ocupacional, durante todo el curso 2014-2015 intenté que se introdujera en el centro a un psicólogo para tratar dicha morbilidad y que emitiera diagnósticos con rigor de forma formal, ordinaria e inmediata pero mi propuesta siempre fue desestimada por lo de siempre:

- Falta de presupuesto y por la no obligatoriedad de la atención psicológica directa en el centro, cuando sí que hay otros servicios como peluquería , animación sociocultural... , así como en otros centros también se contaba con podología, equinoterapia, canoterapia ...y 1000 cosas más.

Por propia iniciativa emprendedora y siempre partiendo de una fundamentación (la estrecha relación entre la memoria y las emociones), propuse a un amigo psicólogo que colaborara como voluntario durante el último semestre de 2013 para que hiciera dinámicas de grupo (dentro de la residencia) vinculadas a la terapia ocupacional e hiciera de paso un balance de la situación psicoemocional de los residentes.

El resultado tuvo las dos caras de la misma moneda, la cara y la cruz...

la cara ...fue la gran aceptación del abordaje psicológico así como la participación del colectivo,  sin embargo, la evidencia fue... la cruz, resultó aplastante en cuanto a la incidencia de los bajos estados de ánimo, baja autoestima, analfabetismo emocional y depresiones leves o establecidas...EN UNA PALABRA ... LA TEMIDA PERO A LA VEZ  IGNORADA Y/O DERIVADA...    GRAN MORBILIDAD ... EN EL CENTRO.

El problema surgió a principios de 2014 cuando el psicólogo tuvo que marcharse de León ... ¿quién abordaría la demanda en base a esta necesidad recientemente creada y ...posteriormente evidenciada ...como cruda realidad? ¿trabajo psicoemocional...? pues claro, había que hacer algo...

Aprovechando que en febrero de 2014 creé un grupo específico donde se trabajaba las capacidades mnésicas a nivel avanzado, decidí profundizar aún más, vinculando el temario de terapia ocupacional con el apartado de los estados de ánimo, añadiendo que previamente consulté al psicólogo (amigo mío) donde estaban mis límites y mis competencias al respecto (para evitar cometer intrusismo profesional).

De esta forma realizaba dos labores, a la vez que realizábamos ejercicios de memoria, preguntaba también qué tal se encontraban los residentes, compartían confidencias y todo quedaba en el grupo como fuente de liberación y descarga psicoemocional (charla e intercambio mnésico emocional).

Todo se desarrollo así... sin avanzar mucho más ...pero, sin rendirme... en plan "sin prisa pero sin pausa"...hasta que ...en enero de 2015 ...
inicié un nuevo curso "los gérmenes de la infelicidad..." que acabó en abril y eso me dio inspiración para la idea final...la colaboración del Teléfono de la Esperanza de 2015 en una residencia de ancianos,

Un instrumento que proporcionara una formación y reeducación psicoemocional reglada y reconocida a nivel nacional e internacional (me imagino que también)... ahora bien...

la segunda parte era convencer a la dirección del centro de que LA PSICOLOGÍA no era un entretenimiento sino una necesidad de salud...

y gracias a ella, todo pudo ser posible, y gracias a su capote final pude iniciar el curso protagonista de esta reflexión, ya que tan importante es  el durante y el después como el antes de todo...por eso...
con tanto detalle os he mostrado...LOS ANCEDENTES / prolegómenos...

PARA ENTENDER LAS CONSECUENCIAS ... HAY QUE SABER LAS CAUSAS...
DE DONDE VIENE EL PROBLEMA...PARA PODER DARLE LA MEJOR SOLUCIÓN...
POR ESO HABÍA QUE  ELEGIR EL COLECTIVO Y  LOS CONTENIDOS
Aptitudinalmente, el colectivo de ancianos debían de ser válidos y con cierto nivel cultural debido a los contenidos abstractos de los temarios y por  no contar tampoco con antecedentes de adaptación al respecto.

Actitudinalmente,  preparados con una disciplina y capacidad de compromiso ejemplar ...
Previamente trabajamos la puntualidad, espíritu de superación, compañerismo, conocimiento de nuestras virtudes y limitaciones...
pues la inmensa mayoría de los integrantes provenían de grupos de terapia ocupacional avanzada y específica de memoria).

El número no debía de ser muy elevado (entre 7 y 9) porque también era limitada la duración de la sesión - costumbre de una hora máxime
(los ancianos se cansan más, tienen más fatiga y disminuye antes su concentración).

También surgieron diferentes adaptaciones como a nivel visual (textos), auditiva (cercanía al orientador) y otras más que surgieron sobre la marcha.

A nivel ambiental estaba el tema de la privacidad, continuidad-fluidez de la sesión y la siempre esencial...confidencialidad, es decir, la sala aislada y que no fuéramos distraídos por nada ni por nadie ajeno al grupo salvo circunstancias de extrema gravedad.

Otra particularidad a salvar fue ... el escepticismo y desconfianza en las primeras sesiones por parte de los ancianos sobre todo por influencia a nivel educativo-cultural y religiosa (solo me confieso ante mi confesor).


EL DESARROLLO DEL CURSO EN SI...

Un total de nueve ancianos...y una duración de hora y cuarto/hora y media cada sesión, con un global de nueve sesiones desde mediados de octubre a mediados de diciembre.

La asistencia, el compromiso y la puntualidad fue total, algo inédito hasta ahora porque también acompañó la salud y la disposición de todos los participantes (también hay que contar con la ventaja de que se hacía en su propia casa, la residencia es la casa de todos).
El aprovechamiento y la intervención dentro del curso fue diferente según los ancianos, dependiendo de su carácter, personalidad, madurez, estado de ánimo pero también la formación y bagaje cultural.

El papel del orientador-coordinador del curso fue providencial para llevar la batuta y el ritmo de cada sesión así como la evolución de cada participante en cuestión (tomar importantes decisiones).

El papel del terapeuta ocupacional sirvió para aportar más conocimientos al coordinador a nivel general (sector residencial, colectivo de ancianidad) y servir de complemento a nivel particular (seguimiento diario de los ancianos en los respectivos talleres ocupacionales y su comportamiento/incidencias  en el centro).

Dicho tandem resultó positivo y simbiótico para ambos profesionales pues era un proyecto pionero, precisamente por eso, incluso se pensó en la posibilidad de que se ausentara el terapeuta ocupacional por resultar un posible elemento distractor (la confianza conmigo les podía suponer una fuente de bloqueo emocional y dificultar por tanto la labor del verdadero conductor del curso, el orientador psicoemocional).

Finalmente se optó por que participaran los dos y creo que fue un éxito también contando con la preparación previa y las reflexiones posteriores que se llevaron a cabo fueron piezas fundamentales .

Sobre todo se demostró dicha efectividad para solucionar dos grandes problemas que surgieron en las sesiones iniciales:

El hermetismo imperfecto (pequeñas filtraciones sin importancia debido a la inmadurez de los ancianos con este tipo de terapias de grupo y su novedad).

La alta exigencia en que acabaran puntuales las sesiones debido a su entrega ciega hacia otras tareas que podían resultar competencia directa con el curso como era... la colaboración en tareas dentro del centro o las responsabilidades de salud o de cuidado de familiares directos.

El empeño de ambos organizadores unido a la consolidación y adaptación de los participantes a través del paso de las sesiones hizo que ambos problemas se disipasen.
Esto supuso que el coordinador del curso tuviera más tiempo y más tranquilidad para trabajar con el grupo en general y con cada persona en particular, profundizando más en los diferentes temarios a tratar.

Aún así, existe la lógica de siempre  pues hay personas que por su actitud y aptitud, han tardado más en "soltarse y soltar las emociones", algunos han aprovechado más el curso y otros que necesitarán más cursos o madurar-releer los temarios y practicar los ejercicios para llegar al mismo final que deben llegar todos...EL AFRONTAMIENTO DE SU VEJEZ... Y DISFRUTAR POR TANTO DE SU ANCIANIDAD...

Y siguiendo el dicho popular de que el que siembra recoge...

aquí podemos poner como broche final ...
CINCO EJEMPLOS DE NUESTRA COSECHA...

- LO PRIMERO EL EMBLEMA...publicado de forma espontanea
a los cuatro vientos...por una de las ancianas...
OBJETIVO ÚLTIMO Y PRINCIPAL...
DISFRUTAR DE NUESTRA ANCIANIDAD...


- LO SEGUNDO... EL DECÁLOGO DE LEY para ser feliz un anciano...
que marcó la madurez del grupo...y posteriormente la madurez individualizada de cada participante.

- LO TERCERO...EL PASADO...EL TEMA PRINCIPAL Y QUE TANTO DIO QUE HABLAR TODOS LOS DIAS... A TRAVÉS DE NUESTRO ESPEJO...DONDE MIRARNOS, DONDE REIRNOS DE NOSOTROS MISMOS Y DEJAR LAS PENAS ATRÁS...
DONDE APRENDER A VIVIR EL HOY Y DISFRUTAR DE ÉL, SIN PENSAR EN EL MAÑANA Y NI MUCHO MENOS EN EL AYER...

como dio mucho que hablar el espejo donde reflejarse y mirarse para reírse y dejar las penas atrás... PUES GERMÁN NOS REGALÓ UN ESPEJO RETROVISOR DE SU PRIMER COCHE...para que...
"EL SANTO ESPEJO RETROVISOR..." NOS PROTEJA...
y que deberán pasarse de unos a otros (participantes del grupo) ...
este regalo  recuerda una tradición llena de fe y de emoción, de cuando en los pueblos se pasaban entre vecinos la imagen del Santo o la Santa Virgen...protegiendo los  hogares con dicha misión...
(LAS HABITACIONES RESIDENCIALES)...

Y EN ESTE CASO...

PARA PROTEGERNOS DE QUÉ?

DE MIRAR HACIA ATRÁS Y ANCLARNOS EN EL DAÑINO REFLEJO DEL PASADO...PASADO ESTÁ...PERO QUE AÚN ESTÁ...SIEMPRE QUE  LE DEJAMOS ENTRAR...

PARA RECORDARNOS QUE HAY QUE MIRAR PARA ADELANTE...
QUE HAY QUE TIRAR PARA ADELANTE...
CUESTE LO QUE CUESTE...
HASTA QUE VENGA LO INEVITABLE...    LA MUERTE...

- LO CUARTO:   sellar con nuestras palabras y nuestro arropamiento  grupal...EL PODER DEL GRUPO...
quedando constancia la gran obra final...
DONDE TODOS SE DIERON UN BAÑO DE AUTOESTIMA UNOS A OTROS... ESO QUEDARÁ EN LA INTIMIDAD DEL GRUPO...Y CADA UNO GUARDARÁ EN UN PAPEL...ESA BAÑO ETERNO...

- LO QUINTO Y MÁS IMPORTANTE...MIENTRAS QUE SABOREAMOS NUESTRO CARAMELO VITAL...recordad...

 que este curso CARAMELO Y SU ENVUELTA no acabará aquí ...

GERMÁN SEGUIRÁ COLABORANDO para que este curso de AFRONTAMIENTO DE LA VEJEZ...siga haciéndose en sucesivos años dando la oportunidad a los que quedaron a las puertas y no entraron...
unos por desconfianza y otros porque la sala y el tiempo no daba para tanto...


POR ELLOS...PARA SIEMPRE Y EN TODO MOMENTO... 

Acabo dando las gracias al COORDINADOR DEL GRUPO, que ha sido un maestro, para mi desarrollo personal (aquel Ferry que dibujé en 2013 es hoy un Yate autodirigido y autocontrolable) y para el buen desarrollo de este grupo de ancianos. Muchas gracias.




lunes, 28 de diciembre de 2015

Estamos encantados

La Redacción del Blog

MERCEDES MARTÍNEZ, EX PRESIDENTA DEL TELÉFONO DE LA ESPERANZA DE LEÓN, PROPUESTA PARA EL CARGO DE
PRESIDENTA NACIONAL DEL T.E.
Según fuentes bien informadas, una incontable oleada de voluntarios del T.E. están promoviendo la candidatura de Mercedes Martínez, ex Presidenta del T.E. de León para el cargo de Presidenta nacional de dicha organización, que próximamente quedará vacante por el cumplimiento del mandato del actual Presidente, D. Juan Sánchez.
Desde la organización se busca una persona dinámica, que disponga de tiempo, con posibilidades para viajar, con coraje y entusiasmo para regir los destinos de una ONG puntera en la salud emocional e intervención en situaciones de crisis. “Creemos que Mercedes reúne todos los requisitos que se necesitan para hacer los equilibrios necesarios entre las diversas posiciones y llevar a buen puerto esta organización que tal alto prestigio social ha conseguido. Necesitamos subir el ánimo. Después de una situación de crisis como la que se ha vivido es necesario renovar la organización con caras nuevas que aporten ilusión e ideas de futuro. El buen hacer de la organización de León durante su mandato avala a Mercedes para tal alta distinción”.
Puestos en contacto con la organización de León, desvelan a este medio que “la propuesta parece ir en serio, que viene avalada por unos cuantos Presidentes de diversos centros que evocan el buen aroma que dejó su presencia en los puestos de dirección”
La propia interesada, Mercedes Martínez ha manifestado a este medio: “Solo aceptaré el cargo de Presidenta nacional del T.E. si mi candidatura es respaldada por la mayoría de los voluntarios, mediante una votación directa. Tenemos que dar un paso en democracia interna y en participación. También necesitamos recuperar el espíritu inicial de nuestro fundador, Serafín Madrid, que con más ilusión que medios puso en marcha esta ONG. Últimamente hemos dedicado demasiados esfuerzos a cuestiones internas, cuando nuestra razón de ser es menguar tanto dolor existente y dar razones convincentes para seguir esperando”. “No me gusta dar consejos a los voluntarios, pero si tuviera que decir alguno sería: Quiéranse ustedes,  así podrán querer con calidad a los demás”.
Desde este medio celebramos el acierto de la Organización del T.E. en pensar en una persona tan valiosa y que tantas reuniones de gloria emocional ha aportado en cientos de ciudadanos. Antes de cerrar nuestra conversación, que tuvo lugar a media noche, la propia Mercedes nos comunicó: “En la candidatura que presente, si al final decido dar el paso, ocupará un lugar importante Jose, mi marido, que me ha demostrado  una fidelidad y una cercanía total”.
Pedimos a todos nuestros internautas que dejen su opinión en nuestro contestador automático, que en este caso es en “comentarios”.
domingo, 27 de diciembre de 2015

Lucecitas

La Escribana del Reino
M. E. Valbuena


En mi barrio no hay luces, ni pinos, ni ningún otro tipo de adorno navideño. Digamos que vivo en un barrio moderno y aséptico donde no se celebra nada con el fin de respetar todas las creencias y no dañar a ninguna colectividad. Para no ahondar más vamos a suponer que es esa la razón.
Sin embargo, algunos vecinos ya se encargan por su cuenta de recordarnos que estamos de fiesta. Sólo con mirar por la ventana puedo ver varios Papa Noeles subiendo por los balcones, escaleras con los tres Reyes Magos, algún árbol decorando las terrazas, juegos de iluminación colorista, animaciones varias…
Una de estas tardes, negra y espesa de niebla, descubrí algo que me dejó con la boca abierta. Al volver una esquina encontré una casa con tal profusión de lucecitas que me detuve un rato a observar el efecto. El marco de la puerta de entrada estaba decorado con bombillas de diferentes colores, el balcón superior con guirnaldas de luces verdes, las ventanas con lluvia permanente de color azul, del tejado pendían ramilletes con flashes rojos y, por si faltase algo, un gran pino iluminado ocupaba el pequeño jardín de entrada.
Al margen de lo estético –en lo que no me voy a meter– cuando me recuperé de la sorpresa inicial pensé en el tiempo que sus moradores han invertido en crear tal espectáculo y en su afán de soportarlo cada día.
Me emocionó que, en estos tiempos, haya gente con esa capacidad de ilusionarse y de mostrar, a golpe de lucecitas, su ilusión a los demás.
sábado, 26 de diciembre de 2015

Sabiduría

Lao Tse

Quien conoce a los hombres es inteligente.
Quien se conoce a si mismo es iluminado.
Quien vence a los otros posee fuerza. 
Quien se vence a si mismo es aún más fuerte. 
Quien se conforma con lo que tiene es rico. 
Quien obra con vigor posee voluntad.
Quien se mantiene donde encontró su hogar, perdura largamente.
Morir y no perecer, es la verdadera longevidad.

viernes, 25 de diciembre de 2015

Navidad

Valentín Turrado

Soy uno más anhelando el infinito, la verdad, la compasión.
Uno más en esta infinita cadena de pasos pequeños;
pasos pequeños, inciertos, necesarios,
necesarios de luz, de inmensidad,
inmensidad de Dios, de ti, de mí.
Una pequeña nada que a veces se avista todo
y vuelve a ser nada.
jueves, 24 de diciembre de 2015

Perdona



Antes de irte a dormir, antes de despertarte, de comer, de salir, de jugar... de todo, PERDONA, PERDONA.
¡Es por ti mismo!
miércoles, 23 de diciembre de 2015

Miradas

Conversaciones con mi mente
M.ª José Calvo Brasa


Nos andamos buscando a ratos, cuando pensamos que no nos vemos. Yo veo tu mirada esquiva salir huyendo en cuanto la mía la encuentra; tú ves la mía evadirse en cuanto la tuya se acerca. Y mirada a mirada nos buscamos mientras nos escapamos. Quizá estamos esperando un mágico momento en el que todo sea posible y las palabras fluyan, bendiciendo las miradas. Pero ni el momento llega ni nuestros ojos se apagan.
No sé qué bulle en tu cabeza, y bien quisiera descubrirlo. Sólo se que tus ojos vienen cuando creen que los míos se han ido. Quizá también sepas que los míos se te acercan como ladrones de los tuyos. Y así nos miramos, tontamente sin apenas llegar a vernos. Tú pasando de largo cuando te miro; yo, escondiendo los ojos cuando me miras.
Parece absurdo mirar con temor a encontrarse. Sería más fácil quizá hablarse, pero el primer paso sigue esperando que alguien lo mueva, y por miedo o por vergüenza, las palabras siguen muertas en algún rincón de nuestras gargantas. Yo sólo se que temo equivocarme, temo el error y temo la herida que este cause. Pero ante todo se que temo encontrar, tras el limpio y cristalino brillo de tus ojos, el vacío, la nada; el silencio que emana de quien no tiene corazón o alma.
Y así nos seguimos mirando y ocultando, jugando al gato y al ratón sin salir un solo milímetro de nuestra trinchera protectora. Quizá surja la magia algún día o quizá todo quede en nada; pero mientras tanto, sonrío cuando veo que me miras y me huyes; me frustro cuando te miro y disimulo apartando rápidamente la mirada.
martes, 22 de diciembre de 2015

¿Que estela quieres dejar en los otros?

Pax Vostrum
Beatriz


¿Qué representa esta foto para ti?  ¿Qué es una estela?   Según la RAE:

Halo:
-  Meteoro luminoso consistente en un cerco de colores pálido que suele aparecer alrededor de los discos de Sol y de la Luna.
-  Círculo de luz difusa en torno de un cuerpo luminoso.
-  Aureola (de las imágenes sagradas).
-  Brillo que da la fama o el prestigio.

Estela:
-  Señal o rastro de espuma y agua removida que deja tras sí una embarcación u otro cuerpo en movimiento.
-  Rastro que deja en el aire un cuerpo en movimiento
-   Rastro o huella que deja algo que pasa.

¿Reconoces esta palabra en tu día a día?  ¿Qué hay de las estelas que los otros dejan en ti?  ¿Cómo te sientes después de estar con determinadas personas? ¿Cambia tu “energía”, “tu vibración”, tu manera de sentir?    ¿Notas la diferencia entre el “antes” y el “después”?  
¿Y qué hay de la que dejas tú?  ¿Imaginas o sabes cómo se sienten los otros después de estar contigo?  ¿Puedes suponerlo?

¿Por qué somos adictos a determinadas personas con las que no nos sentimos bien después de estar en su presencia?   ¿Y por qué a veces preferimos quedarnos con la gente conocida que no nos gusta a aventurarnos en conocer a otros que nos aporten más?

¿Eres de los que se queja por los que están a su alrededor constantemente?  ¿Te sueles rodear de personas positivas que “alimentan” tu espíritu o de personas que “te lo comen”?  

¡Cómo pretendes volar si no te alejas de los que continuamente te arrancan las plumas!
O tú….¿arrancas plumas?

Halo o estela es esa huella que dejamos en los otros y esa huella que los otros dejan en ti. 
¡¡¡¡Conviértete en aquello que quieres para ti!!!! Se aquello que quieres para ti.  Hay un plegaria de San Francisco de Asís que me entusiasma, y que no puede reflejar mejor este tema:

Señor, haz de mi un instrumento de tu Paz,
Que allá dónde haya odio, yo ponga el Amor.
Que donde haya ofensa, yo lleve el Perdón.
Que haya donde haya discordia, lleve yo la Unión.
Que donde haya duda, lleve yo la Fé.
Donde haya desesperación, yo lleve la Alegría.
Que donde haya tinieblas, lleve yo la Luz.

Señor, haz que yo no busque tanto ser consolado,
sino consolar,
que yo no busque ser comprendido, sino comprender,
que yo no busque ser amado, sino amar.

Porque es dando, que se recibe,
Perdonando, que se es perdonado.
Y muriendo, que se resucita a Vida Eterna.

¿Que estela quieres dejar en los otros? Yo elijo la de AMOR, porque también me gusta esa cuando el otro pasa por mi lado. 
Se dice que “Siempre queda el perfume en las manos de quien regala rosas”.   Pues que así sea.
lunes, 21 de diciembre de 2015

Claves para conseguir el amor maduro

El rincón del psiquiatra
Alejandro Rocamora Bonilla
Psiquiatra

Foto: Jesús Aguado

Al igual que todo atleta que se precie tiene que prepararse física y mentalmente para realizar una carrera, lo mismo podemos decir de la persona que desee  conseguir finalizar con éxito el siempre difícil marathón del amor. Son necesarias algunas condiciones imprescindibles. Aquí señalaremos las que nos parecen las más importantes:

1. - Favorecer un vínculo maduro en la infancia: el niño que ha tenido una buena vinculación con las figuras paternas y con su entorno, será un buen candidato para establecer una pareja estable. Existen personas  que están incapacitadas para una relación amorosa  duradera porque no han sentido en ellos mismos los efectos placenteros de esa vivencia; en otras ocasiones, cuando se han producidos situaciones muy traumáticas (violencia física, abandono, utilización como una cosa, desvalorización total, etc.) el sujeto pretenderá huir de toda posible unión pues la vive como una reproducción de las primeras. Pero una cosa es evidente: a pesar de todos los pesares y de los conflictos infantiles relacionales siempre el ser humano puede establecer un vínculo sano en la adultez, pues siempre será libre para tomar esa opción.

2. - Saber elegir: la elección de pareja es otro de los momentos decisivos  para el futuro del vínculo amoroso. Si nos acercamos al otro/a en un intento de satisfacer un deseo inmediato o paliar algún problema (soledad, incomunicación salir dela custodia de los padres, demostrar que soy mayor, etc.) habremos firmado de antemano la ruptura. Una relación  amorosa no se puede edificar sobre la necesidad, ni tampoco es solucionador de problemas. El amor es espontáneo e incondicional, no es premeditado ni mucho menos  programado. El amor surge y basta. No obstante una cosa es cierta: una buena pareja es aquella cuyos componentes no son ni iguales ni complementarios, sino que tienen un “carácter equivalente”. Es decir, cuando elegimos desde la libertad (sin presiones ni retos) es posible que consigamos que el otro/a, en su estructura más profunda, sea semejante a uno mismo. Así, una persona muy decidida y emprendedora puede enamorarse de otra más indecisa, pero posiblemente más segura en su esfera más profunda, lo que produce sintonía a la hora de convivir. La seguridad aparente de la primera encaja con la seguridad profunda de la segunda. Es como mirarse en un espejo. Aquí el amor tiene posibilidades de perdurar.

Una conclusión, en este sentido, es la importancia del tiempo de noviazgo, donde la pareja tiene posibilidades de conocer y conocerse a través del intercambio con el compañero. Ambos sujetos deben llegar a un conocimiento en profundidad, mirándose en el espejo del otro, para tomar la decisión de seguir o cortar. Desde esta perspectiva  “el usar y tirar” no son los mejores consejeros para llegar a un amor duradero.

3. - Alimentación continua: el amor, como cualquier  experiencia humana, si no se alimenta muere. Es un proceso dinámico, no estático, que necesita unos cuidados continuos. No comienza y termina en el enamoramiento sino que éste es la  puerta que  abre la posibilidad de realizar un proyecto común. A este respecto, entre las condiciones indispensables, podemos señalar la capacidad de redescubrir al otro cada mañana y ser sensible a los pequeños cambios cotidianos (un corte de pelo, un vestido nuevo,  etc.) como muestra de un reactualizar el amor cada día. En los pequeños detalles es con lo que vamos alimentando de forma continua el fuego del amor para que no se apague. Es otra de las condiciones para llegar al amor maduro.

4. - Adaptación creativa: es una consecuencia de los anteriores puntos. La vida en pareja  tiene numerosas “novedades” personales y externas (nacimientos, muertes, enfermedades, etc.) que son indispensables ir incorporando con una buena dosis de flexibilidad. Sin una mínima de capacidad de renuncia, ante los cambios externos,  la vida en pareja  peligraría. Es otra de las condiciones para llegar al amor maduro.

El amor maduro

El amor maduro presupone contemplar al otro como es. Con sus “virtudes” y fallos”, no como un “superman” o una “mujer diez” (idealización)  sino como a una persona que se quiere no por sus defectos, sino “con” sus defectos. Mientras que el amor inmaduro se acerca al otro porque le necesita; el amor maduro proclama el mensaje: “te necesito porque te amo”.

El amor auténtico  se basa en el mutuo reconocimiento de las dos libertades". Es desde ese respeto hacia el otro, y su propia idiosincrasia, desde donde se construye el auténtico amor. Cuando amamos a alguien debemos permitirle que siga fiel a su propia identidad. No es amor cuando lo que se persigue es poseer, absorber o cambiar. Solo debemos ayudar a que siga como es. Además, el amor no es una carrera por el poder, sino por el contrario, debemos renunciar momentáneamente a nuestros deseos, para que el otro se sienta seguro y feliz.

También, el amor tiene otra dimensión: nos ayuda a no caer en la angustia y la depresión, y al mismo tiempo, es la puerta de entrada para recuperarnos de los vaivenes de la vida cotidiana. El amor evita el caos; pero también, si se produce el sufrimiento, solamente a través del amor podemos salir.

domingo, 20 de diciembre de 2015

Fiestas
de calendario

La Escribana del Reino
M. E. Valbuena

Cada cierto tiempo el calendario nos marca alguna fiesta. En principio, fiesta significa ocio, descanso, diversión, relajación, celebración y cosas similares.

Pero algunas veces no tenemos cuerpo ni ánimo para celebraciones. Vivimos con el automático puesto, haciendo mecánicamente lo que toca hacer, sin vivir realmente lo que toca vivir.

Y cuando vemos una fiesta en el calendario (o varias seguidas) nos puede más el cansancio de los preparativos que la ilusión del encuentro, el agobio previo a la celebración que el deleite de disfrutar el momento compartido, la presión por estar a la altura que el agradecimiento por tener con quien vivir y compartir casi todo, incluido el desánimo y las pocas ganas. Y queremos huir, no estar, hacer como que no existen. Nos sale nuestro lado anarquista y nos ponemos de espaldas al calendario.

Queramos o no ahí están de nuevo las fiestas, a la vuelta de la esquina, recordándonos que nos “vistamos de domingo” –como dice Ismael Serrano- y celebremos.

¿Celebrar qué?

Celebrar el hecho de encontrarnos y compartir. Agradecer lo que tenemos, lo que la vida nos da en cada momento, lo que hemos perdido y hemos ganado, lo que hemos aprendido en el camino. Celebrar los buenos momentos vividos, que posiblemente no sean pocos. Ser conscientes del presente, de cómo cantan los pájaros incluso en la niebla, de cómo avanza la vida incluso a oscuras.

Hay muchos motivos para celebrar. Más de los que creemos. El calendario no hace sino recordarnos que los celebremos.

sábado, 19 de diciembre de 2015

Corazón

Alicia Martínez
Nuestro propio corazón nos sigue sobrepasando.
Rainer María Rilke

Algo se abre paso y sabe,
lo sabe una mirada,
las lágrimas, lo sabe
lo que grita en nosotros
porque ama.

Algo se abre paso,
podemos confiar
en lo que irrumpe.

Algo late ahí,
es incómodo,
audaz y nos arrastra
a lo impensable.

Es bueno dejar hacer
al corazón, dejar que nos informe
acerca de la vida.
Solo el corazón sabe lo que es real.

Bendita esa flor que nos nace dentro
y es más grande que nosotros.

A veces, no sé más que eso,

que nacer.

viernes, 18 de diciembre de 2015

Autoestima

Sergio


Con la llegada de “la vuelta al cole” y el temido septiembre de los perezosos alumn@s nos fuimos embarcando en un viaje para intentar recuperar esa asignatura que en algún momento dejamos pendiente y descuidada.
Un largo viaje pero fructífero en auto: el autoCONOCIMIENTO, la autoACEPTACIÓN y la autoESTIMA.
"Para hacer mas equilibrada esta aventura, nuestra Monitora dividió el trayecto en diez etapas. En cada una de estas sesiones, Mercedes nos recibió con cariño, nos alentó y nos alumbró el camino por el que debíamos avanzar.
Cada día que pasó supuso un reto. Estoy convencido que tod@s comenzamos con dudas pero a medida que avanzábamos en nuestro trabajo hacia la introspección, nos ayudaba a entender, aceptar y comprender mejor las situaciones que a cada uno nosotr@s nos acompañaba.
Compartimos diez semanas en total y en nuestros rostros a medida que avanzábamos se dibujaba la serenidad, la templanza y la satisfacción por un trabajo bien hecho. 
Cambiamos las lágrimas de emoción por sonrisas y poco a poco nos empezamos a sentir unidos unos a otros y a nuestro interior pues ya no viajábamos sol@s. Viajábamos en GRUPO.
Solo queda agradecer al Teléfono de la Esperanza por preocuparse por el bienestar de la gente que comparte este planeta.
jueves, 17 de diciembre de 2015

Ver lo que sobra
y no lo que falta

Xavier Guix
El País Semanal

Muchas personas viven creyéndose siempre necesitadas.
Pero el secreto consiste, precisamente,
en desprenderse de lo que se tiene en exceso.

Escuchar los avatares de las personas sirve, por lo general, para evidenciar su mundo de faltas, de carencias personales, todo un inventario de lo que creen no tener: “Es que no tengo suficiente autoestima. Lo que me falta es más confianza en mí. Si tuviera más tranquilidad. Si no fuera por esto o por lo otro. A ver si encuentro una pareja. El día que encuentre trabajo…”. Todo son comentarios sobre lo que no se tiene, lo que se perdió o lo que debería haber sido y no fue.Todo se basa en lo que no existe, lo que falta aún o lo que ya no se tendrá nunca.
Que en la vida nos puedan faltar cosas es una perspectiva, incluso motivadora, para ­alcanzar nuestros propósitos. No lo tengo aún, pero lo quiero. No obstante, de lo que aquí se trata es de aquellas creencias que, como sentencias, sostienen el concepto y la imagen que tenemos de nosotros mismos. Para algunas personas se trata de un retrato carencial, basado en la falta de posibilidades, capacidad y merecimiento. Viven creyéndose necesitadas, incapaces y con poca autoestima.
Otras personas, en cambio, utilizan la carencia como eslabón perdido en su ­imagen de perfección. Son autoexigentes, tendentes al enfado por una nimiedad, algo hinchadas de ego, por no decir narcisistas, excesivamente susceptibles a la crítica y amargadas, por supuesto, porque a las cosas siempre les falta ese puntito. Al final, unas y otras escapan del vacío carencial, de la insatisfacción penetrante, a través del espejismo idealista, de la ilusión de que llegará ese día, como la lotería, en que se encontrarán con todo lo que les faltó, con todo lo que algún día soñaron con poseer. Ignoran la trampa: aprenden a vivir en la falta y no en el deseo de lo que tienen.
Los relatos sobre nuestras faltas parten de un supuesto anómalo. Pongamos el caso de la persona eternamente enamoradiza. Quien ama así no conoce al amor. Conoce el buscarlo. Conoce el desearlo. Conoce el vacío de su inexistencia. Conoce el eterno retorno al amor vivido, pasado, perdido. En cambio, no sabe amar. No ha permanecido en el amor. No ha convivido amorosamente. Por eso cree que le falta y que, de encontrarlo, toda su dicha sería completa.
Sin embargo, lo real suele ir por otros derroteros. Aquello que no se conoce es más difícil de reconocer. Hay personas, por ejemplo, que son excelentes guardianas de los demás, son protectoras. No obstante, ¿quién las protege a ellas cuando lo necesitan? ¿Se dejan proteger? Cuando alguien lo intenta, no lo saben ver, no se dejan. Lo rehúyen porque no saben qué es dejarse proteger.
Del mismo modo, el que vive en la falta de amor no sabe reconocerlo más que en sus ensoñaciones. El problema es que el día que lo tenga, por no reconocerlo, lo volverá a perder. Porque de eso sí sabe. Si quiere reconocer el amor, tendrá primero que permitirse conocerlo. Y para que eso sea posible deberá quitarse de encima lo que le sobra, es decir, tanto supuesto desamor, tanta falta, tanta ensoñación, tanto miedo o tanto hedonismo. De eso va sobrado.
Muchas veces somos injustos al tratar a los demás a partir de sus faltas. Metemos el dedo en la carencia y les exigimos que se ocupen de rellenar los huecos que vemos en ellos y sean felices de una vez. Pero no advertimos que nuestro dedo apunta a una montaña inalcanzable, porque acentúa sus faltas. Mostrar el hueco no es suficiente para ocuparlo; lo que hace precisamente es incidir en las carencias. Y ver ese aspecto es un pozo sin fondo. En cambio, saber identificar lo que sobra es el primer paso para aligerarse.
Aunque parezca que los relatos de posguerra han pasado a mejor vida, lo cierto es que la idea del trabajo sufrido y el miedo a la nada siguen instalados en la memoria de muchas personas. Sea por haberlo escuchado repetidamente en casa, sea porque está en el árbol genealógico, la vida se plantea como una lucha, un esfuerzo continuado: ¡hay que ganarse la vida! Son, sin duda, los relatos de la carencia pura y dura. No sobraba nada porque faltaba de todo.
La idea de que hay que ganarse la vida, no el sueldo, reproduce una visión de la realidad carencial. Vivir es un sobreesfuerzo, y salir adelante es lograr todo lo que no tenemos. La dignidad se demuestra viviendo sin grandes faltas. El reconocimiento social llega por presumir de lo que se ha logrado (títulos, propiedades, éxito…). Todo aquello que, en realidad, es prescindible para lograr una auténtica felicidad. La vida no hay que ganarla, porque ya lo hicimos al nacer. Ya estamos ahí. Con mejores o peores condiciones, pero estamos ahí. La vida, entonces, hay que merecerla. Hay que aprender a tener una vida buena, más que echar en falta una buena vida.
Cuando la atención la ponemos en las carencias, no hay más que una comparación tramposa. Miramos al que más tiene y no al que menos. En la comparativa social preferimos parecernos a los más opulentos. Y eso nos mete de lleno en la necesidad. No se nos ocurre, por ejemplo, gozar del privilegio de abrir un grifo y disponer de agua caliente, aspecto del que carecen millones de personas del planeta. ¿De qué nos sirve la comparativa? ¿Es para valorar y merecer más lo que tenemos o, por lo contrario, para desmerecernos por lo que no poseemos?
El tener y el no tener están en realidad en nuestra mente. Dependen exclusivamente de la dialéctica mental, de los discursos o debates que tenemos con nosotros mismos. Hay algunas cosas que ya sabemos. Hay gente privada de muchas cosas y no por ello pierde la alegría de vivir. En el otro extremo, aquellos que más tienen no serán más felices por tener aún más. Al final, todo es una cuestión de actitud. Por eso hay que estar alerta de nuestros diálogos internos, de lo que nos decimos en nuestras dialécticas mentales, por la sencilla razón de que están construyendo nuestra realidad.
Aunque el diálogo es con nosotros mismos, gran parte de lo que pensamos viene de fuera. Ha sido elaborado por paradigmas dominantes como la política, la religión, la ciencia o la economía. Muchas veces ocurre que lo que creemos que necesitamos, tiene su origen en dialécticas creadas por tales paradigmas: lo que podemos o no podemos (política); lo que debemos o no debemos (religión); lo que sabemos o no sabemos (ciencia), o lo que tenemos o no tenemos (economía). Vale la pena escucharnos repetir una y otra vez “no puedo”, “no debo”, “no sé”, “no tengo”. Es la manera más sutil de organizar la vida alrededor de lo ajeno, de lo inalcanzable, de lo desposeído o del peor de los escenarios: la desesperación por tener que convivir con ese yo atrapado por todo lo que todavía no hemos alcanzado.
Si sumamos carencias individuales, paradigmas dominantes y la necesidad de consumo “tecnomediático”, acabamos viviendo en la falsa idea de que o bien no tenemos lo que nos merecemos, o bien no nos merecemos lo que tenemos. Extraña paradoja, que solo puede ser resuelta a lo epicúreo, es decir, entendiendo que libertad quiere decir desarraigo de todos aquellos mundos ideológicos, mitos o paradigmas, ritos religiosos, prejuicios culturales, interpretaciones tradicionales, aposentadas sin crítica en el lenguaje y transmitidas en los usos sociales. ¡Feliz tú que huyes a velas desplegadas de toda clase de cultura! Y eso empieza por dejarse en paz, liberarse de tanta dialéctica mental y apropiarse de uno mismo. Dicho de otro modo, amar lo que es propio y no desear lo ajeno. Ver lo que nos sobra y no lo que nos falta.




miércoles, 16 de diciembre de 2015

La escucha en situaciones límites

El rincón del psiquiatra
Alejandro Rocamora Bonilla
Psiquiatra


Cuando comienzo a escribir esta colaboración aún resuenan en mis oídos los disparos en una sala de fiestas de Paris y en mi retina persisten las imágenes de las carreras de los peatones para huir de la muerte. Y me viene a mi cabeza un pensamiento de Freud: “la ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tan eficaz como unas palabras bondadosas”. Y es en las situaciones límites donde esa idea de Freud recobra un significado pleno: la escucha activa es un buen ungüento para las heridas del espíritu.
El arte de escuchar se complica en las situaciones límites. Ahí es como si el dolor se multiplicara por todas las víctimas y familiares que viven ese sufrimiento, y además el sentimiento (la rabia, la impotencia, la culpa, etc.) surge a borbotones entre los supervivientes. El interlocutor se ve tan invadido por ese “gran dolor”,  y por esto,  a veces le cuesta poner una distancia saludable con las victimas y familiares.
Entre las características de la escucha en situaciones límites, señalamos las siguientes:
Primacía del contacto físico sobre la palabra: ante el llanto desgarrador de la madre que se ha enterado que su hijo ha fallecido en un atentado terrorista o los gritos de reproche del marido cuando le comunican la muerte de su mujer en un accidente aéreo solamente podemos dar un abrazo o un fuerte apretón de manos como transmitiendo nuestra solidaridad y nuestro dolor compartido. Aquí sobran las palabras, las explicaciones o el buscar culpables ante tanta tragedia. Estar ahí, con la persona que sufre, es la única manera que tenemos para mitigar su dolor. No obstante, ante todo debemos respetar al sufriente, pues a veces, éste por los rasgos de su personalidad, huye incluso de todo contacto físico.
Primacía del “aquí y ahora”: en esos momentos de gran dolor no podemos tomar una actitud terapéutica rígida, como sería intentar descifrar el origen del sufrimiento, como lo hacemos cuando entrevistamos a una persona en nuestro despacho, tras pedir hora. Por esto nuestra preocupación se debe centrar en las necesidades tanto físicas como psíquicas de ese instante: ofrecer una tila o un café, buscar un analgésico para el dolor de cabeza o posibilitar la exteriorización de los sentimientos más negativos: rabia, culpa, etc. Todo ello en un clima de tolerancia máxima, siempre y cuando no exista ningún peligro para algunas de las víctimas. Sería un error intentar “psicologizar” esa situación buscando una explicación del sufrimiento o analizando el tipo de vinculación entre los familiares o su resolución del Edipo, por ejemplo. El sufrimiento está ahí y el ayudador está para contenerlo y en todo caso intentar canalizarlo, para que las consecuencias sean las mínimas. No olvidemos que las víctimas necesitan ayuda, pero eso no significa que sean enfermos mentales.
Huir de los estereotipos: “esto pasará pronto”, “al parecer no sufrió”, etc. Cuando el dolor está a flor de piel estas palabras suenan a huecas y sin sentido, y en ocasiones se pueden vivir como un ataque. Es lo que ocurrió en mi experiencia de IFEMA cuando estábamos atendiendo a los familiares de los atentados terroristas de los trenes de Atocha. En un momento dado una psicóloga, que me acompañaba, preguntó a la madre que había perdido a su hija de veinte años: ¿Cómo se encuentra VD.? Pregunta que en otro contexto sería totalmente inofensiva, provocó la desesperación y la rabia de la interlocutora. Pues como ella misma dijo: ¿Cómo quiere que me encuentre si me han matado a mi hija?
La importancia de la contención:  entendida, no sólo como receptáculo del sufrimiento ajeno, sino como un medio para evitar la descompensación del sujeto o la caída al vacío; y esto se consigue, no con soluciones fáciles, sino con una actitud cálida, comprensiva y firme que provoque seguridad en el cliente. Pero además, esa actitud contenedora no debe provocar la toma de decisiones aceleradas, que lo único que refleja es la inseguridad del ayudador.
La importancia del “nosotros”: en las situaciones límites se constata que cuanto más cohesionado esté el grupo menos perturbación producirá la tragedia. En estas situaciones una cosa es evidente: las razones sirven poco, lo que ayuda es la proximidad, la solidaridad, la transferencia positiva. Por esto es necesario crear un clima de comprensión, no de razones, para abortar la angustia. Debemos pasar de un tú, y un yo, a un nosotros, que potencie un clima de confianza y seguridad. Por esto podemos afirmar que toda conducta que favorezca la cohesión del grupo y fortalezca los valores de solidaridad y comprensión será una buena fórmula para paliar la angustia en estas situaciones.
El encuadre no tiene límites espaciales ni temporales: nuestra ayuda en las situaciones límites no tiene ningún condicionamiento temporal (puede durar minutos, horas o días) y además se puede realizar en el hospital, en su domicilio o en cualquier otro lugar.
La comunicación verbal debe ser breve: nuestras intervenciones serán cortas y concisas con mensajes  claros. Y en algunos casos habrá que consignarlo en un papel (dirección del hospital, el número de urgencias, etc.) para evitar olvidos o confusión en la víctima.
Una utopía
La ternura, la compasión, la atención y la solidaridad son algunas de las “píldoras”, que en cualquier circunstancia, pero mucho más en las situaciones límites, nos pueden facilitar un crecimiento psicológico adecuado y en otros casos evitarán que surja alguna grave patología psíquica. Bellamente también lo expresa Freud: “al fin y al cabo hemos de comenzar a amar para no enfermar, y enfermaremos en cuanto una frustración nos impida amar”. De todos nosotros depende, pues,  que esa utopía se haga realidad o no.
martes, 15 de diciembre de 2015

Navidad,
dulce Navidad

El rincón del optimista
Juan

Este año me acordaré de brindar por ti, te lo aseguro.

El frío, la nieve, las luces de colores, los anuncios, la lotería de ‘El Gordo’, los regalos, los villancicos que recuerdan el Nacimiento del Niño Jesús… Todo esto nos predispone a revivir una nueva, blanca y dulce Navidad. Cada vez conozco a más personas que aborrecen la Navidad y toda la parafernalia que la rodea. Respeto, pero no comparto. La razón, el recuerdo del familiar o del amigo fallecido cuya ausencia se deja notar más en estas fiestas tan familiares. Es verdad que se echa de menos a las personas cuando se junta la familia a comer o a cenar, pero también se ha escrito en este mismo escaparate público en varias ocasiones la necesidad de transformar la tristeza de la pérdida en un recuerdo alegre de quien nos dejó. No os miento si os digo que cuando estamos la familia reunida, no importa si es Navidad, verano o en un cumpleaños, rodeando a mi padre, escucho a mi madre decir feliz y sonriente desde su cielo: “Así me gusta veros, así, tal y como yo quiero, tal y como yo os enseñé”.

¿Qué pasa? ¿El optimista se ha vuelto nostálgico y morriñoso? ¡No se puede permitir esta afrenta! O sea, que estoy esperando el apunte del optimista para que me levante el ánimo, y resulta que hoy me lo está hundiendo. Tranqui, tronqui. Permíteme esta pequeña licencia, que el optimista es también ‘hupano’ que diría el gran José Mota.

Como la Navidad transcurre al final del año y al principio del siguiente, no podemos por menos que hacer balance de lo pasado y aventurar lo que puede ocurrir en los meses próximos. En los balances suelen venir a la memoria fechas de desgracias, pero también de las alegrías; y del futuro, ante la angustia de lo desconocido, nos queda el premio del deseo de esos buenos sentimientos que tanto se nombran por ahora: paz, amor y esperanza para el año que afrontamos.

Y un dato muy esperanzador con esto de la Navidad. Te gusten más o menos o nada estas fechas, te juntes o no con la familia, tengas que aguantar al/la pesad@ de tu cuña@ o engordes un poquillo a fuerza de comer más de la cuenta, no me negarás que es todo un triunfo poder decir eso de: “Aquí estamos de nuevo ante otra Navidad, recordando que igual que Jesús, todo tiene su inicio, su nacimiento”. O como decía mi tío Pepe, el filósofo rural: “Lo importante es ir contándolas, salau”. Cuando mi hijo mayor se afana en recoger el Nacimiento y el árbol pasada la fiesta de los Reyes Magos, siempre protesta con tristeza porque se han acabado unas fiestas ilusionantes, con regalos y especiales para él. Yo le intento tranquilizar: “No te preocupes, pues verás como cuando menos quieras darte cuenta, estará de nuevo aquí la siguiente Navidad”. Y efectivamente así me lo reconoce cada año. El tiempo pasa volando y aquí estamos ante la siguiente Navidad con la certeza y la esperanza de que en la cena estaremos todos sentados alrededor de la mesa. Y cuando digo todos, quiero decir TODOS.

Y cuando brinde con cava catalán en la cena familiar, cava que me regalan unos familiares extraordinarios del Alt Penedès, tendré un pensamiento optimista de buenos deseos para todos los lectores del Blog del Teléfono de la Esperanza. No te quepa la menor duda.

Asín sea.

lunes, 14 de diciembre de 2015

Seguimos ofreciendo actividades




ACTIVIDADES PRIMER TRIMESTRE 2016
EN EL TELÉFONO DE LA ESPERANZA DE LEÓN
A.- GRUPOS DE DESARROLLO PERSONAL:
1º.- AUTOESTIMA. Aprender a quererse, a respetarse, a perdonarse es la primera tarea de todo ser humano. La calidad emocional de nuestras relaciones interpersonales viene determinada por el aprecio que nos tenemos a nosotros mismos. Quien no se ama a sí mismo está bloqueado para mantener relaciones sanas. Este grupo, puerta de entrada a toda la formación que ofrece el Teléfono de la esperanza, es una oportunidad para hacer un diagnóstico de nuestro mundo interior y poner en marcha alternativas amables. Se convocan tres grupos con los siguientes horarios: lunes, a las 7 la tarde; y miércoles a las 5,30 de la tarde.
2º.- INTELIGENCIA EMOCIONAL. Muchos son los investigadores que nos recuerdan que el éxito o fracaso en la vida depende más de nuestras emociones y sentimientos – Coeficiente emocional, C.E.- que de nuestra cabeza, Coeficiente intelectual, C.I.  Esto supone e implica cambios en nuestra forma de vivir y cambios en nuestra manera de afrontar la realidad. El mundo emocional está pidiendo a gritos dar a luz. Es urgente estar atentos a lo que surge de dentro y atenderlo. Cuando nos hacemos los ciegos, aparece la enfermedad. Se convoca un grupo, los martes, a las 5 de la tarde.
3º.- LAS CLAVES DE LA FELICIDAD. Todo ser humano busca las claves de la felicidad. El camino para ello no es buscar fuera ni esperar que alguien venga  a poner ese ingrediente tan anhelado en nuestra vida. Hay mucho trabajo por hacer. Cada persona tiene echar la mirada hacia dentro y darse cuenta de aquello que no le hace bien. Los virus, las bacterias, los gérmenes en general están en nosotros. Hay que darse cuenta de su existencia. Porque la felicidad no es una estación término sino la consecuencia de una manera de vivir. Se convoca un grupo, los miércoles, a las 6 de la tarde.
B.- TALLERES PARA CRISIS ESPECÍFICAS: 
4º.- ELABORACION DEL DUELO. Para aquellos-as que la muerte de algunos de sus seres queridos les ha dejado varados en ese triste momento y se sienten a la intemperie, sin recursos sin o con exceso de llanto, en una pena cronificada y una desgana por vivir, por soñar, por seguir, por amar. La vida ha dejado de tener valor y sentido para ellos. Se convoca un grupo para finales de febrero.
5º.- GRUPO ENTRE AMIGOS. Está dirigido a aquellas personas que se sienten solas o incomunicadas y  desean relacionarse e integrarse en grupos de encuentro, diálogo y convivencia. Porque estamos mejor juntos que separados. Una oportunidad para conocer otra gente, hacer otras cosas, divertirse y ampliar horizontes. Se convoca un grupo para los  jueves, cada quince días, a las 7 de la tarde.
C.- CURSOS, GRUPOS O TALLERES ESPECIFICOS:
6º.- CURSO AYUDA A TUS HIJOS A CRECER. Dirigido a padres y educadores que quieran aprender a educar a sus hijos y/o alumnos y establecer con ellos unas relaciones personales más sanas.  Aprender los mensajes YO, negociar las decisiones, trabajar la asertividad y entender la familia como un sistema completo. Este curso se celebrará los días 12, 13 y 14 febrero de 2016. Mínimo 30 personas.
7º.- CURSO AUTONOMIA AFECTIVA. En este curso analizaremos los distintos tipos de apego que las personas podemos tener, el apego ansioso, evitativo, desapego y apego seguro. Analizaremos sus causas y como nos comportamos en el trabajo, las relaciones, en el ocio desde estos apegos. Trataremos de que cada uno vea cual es su tipo de apego y como trabajarse desde ahí. Y nos centraremos de manera especial en la dependencia emocional y como sustituirla por la autonomía afectiva. Este curso se llevará a cabo los días 12, 13 y 14 de Febrero. Mínimo 30 personas.
8º.- BIODANZA. Lo que manifiesta mi cuerpo al moverse es el reflejo de mi ser: “Soy lo que soy en movimiento”. A través de la música, la danza, el disfrute, el placer, tomo conciencia de quién soy, de cómo me relaciono, aprendo a soltar aquello que no soy y que está adherido a mí para convertirme en un ser auténtico en el que exista coherencia entre lo que soy, lo que hago, lo que digo, lo que siento y pienso. Se convoca un grupo para el lunes a las 5 de la tarde quincenalmente.
9º.- CURSO CRECIMIENTO PERSONAL (En Villagarcía). Es la continuación del curso de conocimiento de sí mismo. Se desarrollará del 31 de marzo al 3 de abril.
Metodología: Todos los grupos, cursos y talleres son vivenciales, lo importante es la experiencia de cada persona.
Plazo de inscripción para todas las actividades: Desde hoy hasta el día 31 de diciembre.
Lugar de inscripción: Sede del Teléfono de la Esperanza, en Avda.  Padre Isla nº. 28, 4º izquierda. Por las mañanas o las tardes, de lunes a viernes de 9 a 13 h. Y de 16 a 20 h.
Coste de las actividades: El precio a cada grupo, curso o taller lo pone cada participante de forma responsable según sus posibilidades, salvo los que expresamente vengan determinados. Que nadie sin recursos se quede sin acudir al Teléfono de la Esperanza. Somos una ONG.
Comienzo de las actividades: A partir del 11 de enero de 2016.
Requisitos especiales: Tener ilusión, motivación y ganas de mejorar la propia vida emocional e interior.
Dosis adecuada: Una reunión semanal, de hora y media de duración en un clima de sinceridad, afecto, escucha y cercanía.
Esta convocatoria pueda ser impresa, grabada, transmitida y recomendada sin vulnerar ley ni reglamento público o privado.
domingo, 13 de diciembre de 2015

Haciendo equilibrios

La Escribana del Reino
M. E. Valbuena
Llevo ya un tiempo haciendo equilibrios en mi vida. Equilibrios entre mis demandas y las de los demás, entre lo que debo o tengo que hacer y lo que quiero o puedo, entre lo que me interesa de verdad y lo que tengo que atender. Y así podría seguir.
No digo que sea malo hacer equilibrios. Probablemente la vida sea eso: equilibrar, teclear por aquí y por allá hasta conseguir la melodía deseada. Lo que sí afirmo es que es muy cansado.
Para evitar el cansancio busco fuentes de nutrición y de energía que me den la fuerza que necesito. Las hay. Y muchas. Pero en este momento me resultan insuficientes ante tantos frentes que atender. Bebo cuanto puedo de ellas y, aun así, siento que la energía se escapa rápidamente. Tan rápido como llega.
El camino del equilibrio es arduo de recorrer. Implica saber dar y saber recibir, tirar y dejarse llevar al mismo tiempo. Implica renuncias. Implica lograr y ceder, hablar y callar, escuchar, saber esperar… Difícil aprendizaje.
Ya lo dijo Aristóteles hace más de veinte siglos: en el centro está la virtud. Y si lo dijo un sabio será verdad. Nadie duda hoy de que sean ciertas sus palabras. La experiencia de cada uno puede, además, corroborarlas.
Otra cosa es cómo llegar a ese equilibrio, cómo conseguir pisar la realidad sin desatender los sueños, cómo hacer que la armonía defina nuestra vida sin altisonancias intempestivas.
En fin, continuaré haciendo equilibrios, entre otros motivos, porque no me queda otra.