La frase la escuché hace años, en boca de una compañera, cuando yo empezaba a trabajar en el mundo de la educación. Entonces la tomé como un consejo de los que te pueden servir en momentos de duda y no se me ha escapado de la mente.
Conscientemente no sé si la habré aplicado muchas veces, pero de forma intuitiva, cuando tienes que reaccionar rápido ante una situación conflictiva, sí que he adoptado esta técnica: endulzar –sin empalagar-, en lugar de avinagrar al por mayor. Y me ha dado resultado.
Si ante un fallo, un error o una mala conducta del otro yo respondo con el juicio, la crítica mordaz, la ridiculización o la culpabilización, lo único que conseguiré es una postura rígida y a la defensiva, sin posibilidad de encuentro ni opción de cambio. Entramos en un “a ver quién puede más”.
Si, por el contrario, escucho, argumento y me concentro en resaltar el punto positivo que todo acto lleva consigo, por muy oculto que esté, habré logrado al menos frenar la agresividad y provocar la receptividad. Empezamos a encontrarnos y a partir de ahí...
Mi experiencia con alumnos y compañeros me ha demostrado la sabia filosofía que encierra esta frase.
Por eso hoy la quiero compartir.
La Escribana del Reino
M.E.Valbuena
Comparte la reflexión de la Escribana. Y acepto que esa forma de ir por la vida es más sabia y da mejores resultados. Acercarse a otro con una caricia es ganarselo. Acercarse con una crítica inoportuna o con una contestación ácida o mirada de perdonavidas, es echar chistas, es quemarte y quemarle. La opción parace muy clara: Me apaunto a la miel.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho la frase y la reflexión sobre ella y te felicito, porque eres capaz de ponerla en práctica e interpreto que lo haces con todas las peronas que te presentan un conflicto. Pero cuándo te encuentras en la vida con gente egoista que sólo van a machacarte para trepar en el trabajo a costa de uno, que son mentirosas etc.etc.etc. mi postura ya no es el diálogo es ignorarlas.
ResponderEliminarCreo que todavía necesito muchos cursos del T. de la E. M.A.P.
Una frase muy sencilla pero que sabiduria contiene y cuanto cuesta ponerla en práctica, tenemos que seguir trabajando nuestro interior.
ResponderEliminarMe parece muy buena la filosofía, pero reconozco que me cuesta ponerla en práctica. Soy más de litro de vinagre.
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