MODELOS
PARA UNA CRISIS
II
Entró
precedida por una larguísima ovación, moviéndose con gran ligereza sobre su
silla de ruedas. Una de las primeras frases que nos dijo fue: “puede que
penséis que estar en una silla de ruedas es una faena… Y lo es, pero esto no me
va a detener”
Para
quien aún no conozca a Teresa Perales se trata de la mejor deportista de este
país, la que más medallas ha logrado en cuatro juegos olímpicos y en varios
mundiales de natación. A los diecinueve años a causa de una neuropatía perdió
la movilidad de sus dos piernas. ¿Alguien se imagina lo que puede ser eso? ¿La
cantidad de sueños y proyectos que pueden hundirse? Pues ella supo enfrentarse
a ello: aprendió a nadar y comenzó a competir. Todo un ejemplo de superación
humana.
En
todo el tiempo que duró su intervención no hubo una sola frase de autocompasión
o de tristeza. Sí habló de sus momentos duros, pero en lugar de regodearse en
ellos, se centró tan solo en contar cómo logró superarlos confiando en sí
misma, en su valía como persona y en su gran capacidad.
No
borró la sonrisa de su rostro: una sonrisa de plenitud que lo decía todo, pues
era la sonrisa de aquellas personas que logran sus objetivos y que son dueñas
de sus vidas.
Nos
contó muchas cosas de sí misma, pero su mensaje final fue que todo es posible;
que si creemos en nosotros mismos abriremos las puertas de nuestros sueños.
Aseguró que esto lo tuvo claro desde que su entrenador le dijera que ella era
un diamante en bruto que había que pulir. Se esforzó, consiguió pulirlo y
engrandecerlo hasta hacer de su vida una obra de arte. Y esto es lo que
insistió en recordarnos, para que todos los que la escuchábamos lográramos ver
esa cualidad en nuestro interior y así hacer de nuestras vidas otra obra de
arte.
Teresa
Perales dedica su vida a su familia (se casó, como orgullosamente nos dijo, de
pié, con sus piernas enfundadas en unos dolorosos armazones de hierro que la
hicieron sufrir durante todo el día, pero que le permitieron aguantar la
ceremonia en pié), a entrenar durante horas para la próxima olimpiada y a
enseñar a las personas a superarse y a
alcanzar todos sus objetivos.
Pero
de ella poco nos hablan los medios de comunicación, pues parece que importa más
hablar de desesperación y de tristeza que de estas personas que contra todo
pronóstico alcanzan sus objetivos a través del esfuerzo y la confianza en sí
mismas y en la vida… Sin dudarlo, de los dos modelos para una crisis, yo me
quedo con este último y con una de las frases que nos regaló aquel día: “hay
que ser valiente y conquistar nuestros sueños”
Mª. José
¡Vaya ayuda psicológica que le dio el entrenador!:
ResponderEliminar"ERES UN DIAMANTE EN BRUTO QUE HAY QUE PULIR".
Pepi se queda con esta frase de gran contenido.