Parece mentira

La Escribana del Reino

M. E. Valbuena

Parece mentira...tanto colorido. Jesús Aguado.

Parece mentira que de algo tan feo como un gusano o un bulbo puedan surgir una mariposa o un tulipán, que en nada se parecen a su origen.

O que de una planta tan bonita como la de la patata, con sus grandes hojas y sus flores azuladas, surjan esos tubérculos multiusos, marrones y deformes.

O que tras el frío, la escarcha, la nieve y el hielo, empiecen a brotar tímidamente los tallos tiernos de nuevas flores y, en cuestión de días, el árido, seco y yermo paisaje dé lugar al colorido exuberante y vivaz de la primavera.

O que después de una gran decepción, podamos volver a confiar.

O que la soledad, el llanto, la desesperanza y la desilusión nos enseñen a entretejer, con hilo invisible pero firme, un estado de aceptación y confianza en la vida, con nueva fuerza y nuevas sonrisas.

O que la luz extinta de un atardecer, tras unas horas de desaparición, resurja de nuevo para llenar de vida lo que parecía muerto.

O que el mal individual o colectivo, debidamente programado, no haya acabado con el mundo.

O el intenso ajetreo que las laboriosas abejas y las organizadas hormigas llevan a cabo en el interior de las colmenas y de los hormigueros, sin que lo percibamos.

Me parecen mentira estas y otras muchas cosas más. Y sin embargo, ahí están. No tenemos más que mirar y observar.