Qué alegría cuando elijo...
Qué alegría levantarse y encontrarte de nuevo o por primera vez, con personas que te reciben con una sonrisa, o sin sonrisa y con los brazos abiertos.
Ver entre los compañeros a los organizadores, Valentín y Ángel con el mismo entusiasmo de siempre.
Escuchar a nuestro historiador con esa naturalidad y toques de humor ¡Qué bien lo cuentas, Tomás!
Comenzamos en Ventosa. Pudimos encontrarnos con Marcos, compartir, recordar la “ILUSIÓN” escrita con flores en la carretera por Adela, qué alegría... hasta pasaron tres coches por encima y la ilusión seguía allí, no se quería marchar.
Tuvimos un momento de silencio en el caminar, donde sólo había un metro de distancia entre uno y otro y se fundieron nuestros pasos y respiraciones, no notaba el calor, sólo sentía el aire, el silencio, contemplaba la naturaleza, me relajaba y me unía viendo los pasos de mi compañera delante de mí , yo hablaba conmigo y sentía...
Poder ver los monasterios de Suso y Yuso, en San Millán de la Cogolla, donde algunos descubrimos por primera vez, entre otras cosas, una colección de cantos gregorianos y el significado de escuchar misa.
Por la noche, pudimos ver la película de las anteriores etapas donde una compañera nos guiñaba el ojo a todos conquistándonos, y un pajarito, se equivocaba de papá, pero él, también disfrutó de esos momentos... muchas gracias Javi.
Una vez más, también danzamos, y seguimos compartiendo.
Al día siguiente comenzamos con un momento de meditación, que nos invitó de nuevo a la unión, a verme en el otro, y a la Paz, al igual que el momento con la espiga y el grano.
Más compartir, en grupos pequeños que se formaron en el caminar. Gracias por abriros y así poder conoceros un poco más.
Y casi sin darnos cuenta ya estábamos en Santo Domingo de la Calzada, donde pudimos ver su catedral, que impresionaba por su fortaleza, su arquitectura, sus pasadizos...y nos sorprendió a más de uno, con un corral en el que había ¡un gallo y una gallina!
Cuantas posibilidades de compartir, ilusionarnos, conocer, descubrir, sentir, reír... vivir en el goce... sólo tenemos que volver a elegirlo en cualquier camino, no sólo en este, en el camino diario al trabajo, en él, en el camino a casa, en ella...
Elijamos el goce, la unión, la paz, el amor,... Y será alegre la mañana, compañero, alegre la mañana... gracias por tu sonrisa infinita Javi.
Muchísimas gracias a todos, nos vemos en el camino.
¡Qué buen rollo se aprecia!
ResponderEliminarSobre todo,me quedó con: sólo tenemos que volver a elegirlo,en cualquier camino,en cualquier momento,ahora.
ResponderEliminarGracias.
Me alegro que cada etapa este siendo mejor a la anterior. Habéis formado una nueva familia. Pepi os envía besos, abrazos y aplausos.
ResponderEliminarMuchas gracias Pepi. Me alegra que cada día,haya un comentario tuyo. Gracias.
ResponderEliminarEs una forma de corresponder a tanta enseñanza que este blog me transmite. Pepi.
EliminarTambién quiero hacer mención de los que no estuvieron en el camino,me acordé y me acuerdo de ellos/as. Espero encontraros pronto. Besos
ResponderEliminarQué bien que me lo pasé
ResponderEliminar