Ayer a mediodía seis personas
murieron en las minas de La Pola de Gordón. Seis mineros se encontraron con
la muerte de forma inesperada. Hay, además otros compañeros hospitalizados por los efectos del grisú. Sus familiares sobre todo, pero también
las gentes de estos pueblos y toda persona de bien nos sobrecogemos ante hechos
tan dolorosos.
Los que trabajamos con los
sentimientos sabemos que el sufrimiento en estos situaciones es inmenso. Que
las palabras sirven de muy poco. Que solo cabe estar, acompañar, abrazar.
Desde este blog nos unimos en un
abrazo fuerte con todas esas personas para que noten el consuelo de la
cercanía, el calor de abrazo y la solidaridad de quienes estamos afectados,
doloridos y entristecidos por lo que ha ocurrido.
Nos unimos a todos para que el dolor
pueda ser más llevadero. Un inmenso abrazo.
La redacción del blog
Me ha parecido de gran humanidad que hayáis publicado este extraordinario en el blog en recuerdo a las familias que tanto dolor están sufriendo. Pepi.
ResponderEliminarHonra a la vida quien honra a los muertos y vuestra solidaridad, queridos redactores del blog, "os honra".
ResponderEliminarNo hay respuestas, no hay por qués ni para qués, y de nada sirve mirar a un cielo cubierto de un frío azul donde uno/a no encuentra ningún consuelo: Dios mío, Dios mío, por qué les has abandonado?
En estos días la desesperanza se cierne, una vez más, sobre un colectivo duramente castigado ya.
Lágrimas negras cubren el alma de León, negras como el negro carbón, negras como una alma fiera, como el mayor de los lutos, un luto de amargo dolor, ante el que me descubro querido pueblo minero, porque: " No hay dolor como vuestro dolor y siento vuestra muerte y vuestras heridas".
Hipálage
Me uno a vuestro dolor. El Teléfono de la esperanza quiere estar con vosotros. En silencio, pero con TODOS VOSOTROS Y VOSOTRAS.
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