Mindfulness

Cristina Díaz Viejo

Con este curso me he dado cuenta de que vivía una vida sin vivirla, sin disfrutar plenamente de ella, sin entenderla y sobre todo sin entenderme a mí misma y sin quererme.

Con este curso me he dado cuenta de que hay que pararse a reflexionar lo justo y necesario porque nuestra cabeza muchas veces vive más como nos dice Carmen en el pasado o en el futuro y sobre todo la mía que vive de la imaginación..., vivo en el pasado, en mis buenos momentos, en lo feliz que era en mi vida y mirar como aquello me salía bien, o pienso en el futuro según mi estado de ánimo...

Lo que realmente no estaba haciendo era vivir mi presente; iba por la calle autómata sin sentido. Ahora me paro, miro a la gente, miro la calle, las cosas..., veía pero no miraba o miraba pero no veía entonces esto me ha ayudado mucho de nuestras reflexiones que hacemos semanalmente a cómo comportarme ante ello.

Luego la meditación, la forma en la que solamente tres minutos puede hacer que te relajes o en tres minutos sientas que estás a gusto y bien contigo misma y con lo que te rodea y eso es estupendo.

Yo reconozco que soy muy vaga, algunas de las prácticas que hemos hecho me han costado mucho más, pero que solamente con darme cuenta que no estaba viviendo el presente me ha ayudado al 200%. Ahora cuando tengo un pensamiento negativo o incluso cuando tengo un pensamiento positivo directamente me digo "Cris, esto no está pasando vuelve a la realidad".

Carmen para mí ha sido estupenda, nos ha enseñado muchísimas cosas, nos ha abierto mucho los ojos, y yo la verdad que estoy muy contenta. Si pudiera por temas laborales repetir este curso lo volvería a hacer, porque siempre descubres algo nuevo, aunque sea en una meditación que ya sabes, pero siempre descubres algo nuevo.

Se lo recomiendo a todo el mundo.

Muchísimas gracias, la verdad es que desde que conozco el Teléfono de la Esperanza mi vida ha dado un cambio de 350°

Siempre os estaré agradecida.

Ana

La experiencia de este curso me ha servido de mucha ayuda para volver a vivir y despertar de este estado negativo en el que estaba, lleno de estrés, tristeza y ansiedad;  y de esa depresión tan incómoda de llevar día a día. Gracias a este curso y a algunos más realizados, he aprendido sobre todo a valorarme, quererme y ser mejor persona, la verdad que he tenido unos maestros estupendos que si no hubiera sido por ellos y por ti Carmen, hoy, aquí y ahora no lo estaría ni siquiera escribiendo.

En mi final de esta milagrosa carrera, mi corazón hoy late con paz y armonía con mucho amor; respiro cada mañana con conocimiento y he salvado la vida; siento, oigo, me integro en mí, sabiendo que hoy estoy aquí, que me siento y me adapto a esta sociedad tal y como es; sin complejos, sin prejuicios, voy a ser yo y solo yo; pienso en mi presente.

El hoy y ahora, dándome cuenta que soy yo, que respiro, que mi corazón late hasta que Dios quiera. No plantearme irme cuando las cosas no van bien, sino todo lo contrario; por eso, ¡qué voy a decir de este curso que no sea todo lo bueno y positivo para mí!

Solo os digo mil gracias una vez más, por ayudarme, por apoyarme tanto...