A continuación recogemos el testimonio de una voluntaria del TE de León que mantenemos en el anonimato porque así nos lo ha pedido. Sus palabras expresan el sincero reconocimiento al TE. Merece la pena leerlas y dejar que el pensamiento nos llevo a momentos personales vividos en situaciones parecidas o distintas. Gracias a esta voluntaria por su aportación y a todos los que, asidua o esporádicamente pasáis por este blog. La fotografía ilustra una sala vacía del TE para que sea ocupada por quien desee crecer como persona.
PEQUEÑA HISTORIA DE CÓMO UNA VOLUNTARIA EMPEZÓ SU ANDADURA EN EL TE DE LEÓN
Hacía tiempo que había tomado la decisión de hacer algún tipo de voluntariado. Mi vida era bastante triste por aquella época. Acababa de salir de una relación afectiva de muchos años y me sentía rota y vacía por dentro. Pero a la vez tenía la esperanza de que ayudar a otras personas podía ser una buena terapia y bálsamo para mis heridas.
Una tarde ví un pequeño anuncio en el Diario buscando voluntarios para el Teléfono de la Esperanza en León y lo recorté para guardarlo en la cartera. Al día siguiente llamé y acudí luego a una reunión. La verdad es que no tenía ni idea de lo que me esperaba. Me gustó lo que proponían de primero ayudarme yo antes de poder ayudar a otros y me entró el gusanillo de saber más. La verdad es que iba con esa idea preconcebida de que nada más llegar me iban a poner un teléfono en la mano y hala, a solucionar los problemas del mundo…cuando mi vida era una montaña rusa y una completa infelicidad.
Ahora con la perspectiva del tiempo creo que esto fue providencial, llegó en el momento justo. Antes quizás no hubiera podido enfrentarlo porque hay una parte de crecimiento, de aceptación de mi yo que me costó mucho. Pero ahora doy las gracias al TE, en especial a Mercedes porque descubrir esto fue como un salvavidas. Soy feliz a ratos, pero lo mejor es que sé lo que tengo que buscar, sé lo que quiero y me he liberado de esa carga que llevaba encima y de la cuál no era consciente, además de sentirme útil y querida por los compañeros. Feliz también de percibir el cambio en ellos y el resto de personas que buscan y aceptan el recibir esta ayuda. En definitiva soy una privilegiada y esta experiencia ha supuesto un antes y un después en mi vida y animo a cualquiera que pueda leer este testimonio a probarlo, porque también puede hacer que su vida sea diferente y seguro mucho mejor.
Hacía tiempo que había tomado la decisión de hacer algún tipo de voluntariado. Mi vida era bastante triste por aquella época. Acababa de salir de una relación afectiva de muchos años y me sentía rota y vacía por dentro. Pero a la vez tenía la esperanza de que ayudar a otras personas podía ser una buena terapia y bálsamo para mis heridas.
Una tarde ví un pequeño anuncio en el Diario buscando voluntarios para el Teléfono de la Esperanza en León y lo recorté para guardarlo en la cartera. Al día siguiente llamé y acudí luego a una reunión. La verdad es que no tenía ni idea de lo que me esperaba. Me gustó lo que proponían de primero ayudarme yo antes de poder ayudar a otros y me entró el gusanillo de saber más. La verdad es que iba con esa idea preconcebida de que nada más llegar me iban a poner un teléfono en la mano y hala, a solucionar los problemas del mundo…cuando mi vida era una montaña rusa y una completa infelicidad.
Ahora con la perspectiva del tiempo creo que esto fue providencial, llegó en el momento justo. Antes quizás no hubiera podido enfrentarlo porque hay una parte de crecimiento, de aceptación de mi yo que me costó mucho. Pero ahora doy las gracias al TE, en especial a Mercedes porque descubrir esto fue como un salvavidas. Soy feliz a ratos, pero lo mejor es que sé lo que tengo que buscar, sé lo que quiero y me he liberado de esa carga que llevaba encima y de la cuál no era consciente, además de sentirme útil y querida por los compañeros. Feliz también de percibir el cambio en ellos y el resto de personas que buscan y aceptan el recibir esta ayuda. En definitiva soy una privilegiada y esta experiencia ha supuesto un antes y un después en mi vida y animo a cualquiera que pueda leer este testimonio a probarlo, porque también puede hacer que su vida sea diferente y seguro mucho mejor.
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