El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
Blog
sábado, 14 de agosto de 2010

EN HORAS DE INSOMNIO


Me voy de aquí, no quiero más oírme;
de mi voz toda voz suéname a eco,
ya falta así de confesor, si peco
se me escapa el poder arrepentirme.

No hallo fuera de mí en que me afirme
nada de humano y me resulto hueco;
si esta cárcel por otra al fin no trueco
en mi vacío acabaré de hundirme.

Oh triste soledad, la del engaño
de creerse en humana compañía
moviéndose entre espejos, ermitaño.

He ido muriendo hasta llegar al día
en que espejo de espejos, soy me extraño
a mí mismo y descubro no vivía


Miguel de Unamuno


La fotografía, que titulamos "fresno" nos sirve para ilustrar este poema. Contemplar la naturaleza y el desarrollo armonioso de ella para cuando aparezca el insomnio, puede ser una manera de combatirlo.

Todavía no hay comentarios

Esperamos el tuyo