El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
Blog
lunes, 23 de mayo de 2011

"SALDRÉ ADELANTE COMO SIEMPRE, CUESTE LO QUE CUESTE"

Un momento en la marcha a Valdorria

"UN ANTES Y UN DESPUES" . Testimonio sangrante de una orientadora del T.E. de León



A veces nos tiene que parar la vida para que realmente valoremos las pequeñas cosas,! y no digamos las grandes!..

A mi un día me paró y me hizo una serie de advertencias. Yo corría, iba, venía, programaba el futuro, y mi mente corría mas que el tiempo, y mira que éste corre. Pero un buen día me paró y vaya que si me paró.

Me diagnosticaron una enfermedad crónica. Yo encima, como acostumbro a ver la botella medio llena me alegré porque era "una colitis ulcerosa crónica" y no un cáncer.Y era para alegrarse. Pero antes de cumplir el año del diagnóstico, me dió un brote rebelde y malo, y cuando los médicos pensaban en una semana de hospitalización y tratamiento, y para casa, se convirtió en cuarenta y seis dias de internamiento, pasar por quirófano, muy, muy deteriorada y como último recurso salir sin colón y con una bolsa en el lateral derecho debido a una "ileostomía". Pero me volví a sentir contenta con mi bolsa y sin colon,"yo Vivía!.

Después vendrían otras dos operaciones, una para hacerme "un reservorio", dicho vulgarmente un colon artificial a partir del intestino delgado. La tercera operación cerrar la "ileostomia" es decir quitarme la bolsa.Todo esto en tres años y ocho meses. Lo peor venía una vez quitada la bolsa, mi intestino estaba medio atrofiado y no respondía bien.

Pasé cinco meses de experimentos, siendo internada cada dos por tres, muy deteriorada y con mucho sufrimiento, tambien a nivel psíquico, pues algunas de las personas cercanas me desanimaban diciendo "!Si no te hubieras quitado la bolsa!"...A esto yo respondía "saldré adelante como siempre cueste lo que cueste".

Y asi fué. Hace cuatro años y ocho meses que estoy sin bolsa y después de los primeros cinco meses malos empecé a mejorar.

Desde entonces hago una vida normal, me siento contenta, he aprendido a valorar lo que supone caminar, ser autosuficiente, ya que dependí de ayuda para muchas necesidades.

VIVO con mas ganas de disfrutar, de ser féliz y contagiar mi felicidad.

Todo este crecimiento y valoración se lo debo a la enfermedad y al Teléfono de la Esperanza que me ha ayudado a crecer a partir de las dificultades.

R.A.G.

Gracias por compartir con todos nosotros tu experiencia.

Tenemos 5 comentarios , introduce el tuyo:

  1. Me gusta la gente que suma y SIGUE. Como tú.
    M.E.V.

    ResponderEliminar
  2. Con persona valientes, que aprietan los dientes en las adversidades y continúan el mundo irá a mejor. Me ha llenado de orgullo el testimonio de quien hoy lunes ha tenido el arrojo de contárnoslo.

    ResponderEliminar
  3. Me emociona tu sinceridad y valentía. Eres un orgullo para el Teléfono de la Esperanza

    ResponderEliminar
  4. ¡Que envidia más sana por haber sido capaz de enfrentarte con esa valentia!.
    Tu testimonio también me ha servido para que cuándo yo hable "cuente hasta mil", , pués no creo que te viniera muy bien la frase de "¡Si no te hubieras quitado la bolsa!"; eso fué del pasado, lo que interesaba ya era resolver el presente.
    Me identifico contigo en todo lo que el Teléfono de la Esperanza nos enseña.
    M.A.P.te felicita y te envia un abrazo muy fuerte con el cariño más sincero, deseando que puedas seguir disfrutando de la vida con esa entereza, alegria, optimismo y felicidad que transmites.

    ResponderEliminar
  5. ¡Qué gozo leer y saber el empuje, la fuerza, la valentía y el coraje que demuestras en cada instante!Lo demostraste entonces y sigues haciéndolo. GRACIAS por tu experiencia,por compartirlo con todos nosotros y por hacernos partícipes de ella.¡Cuánto se aprende de estas vivencias!Te doy la enhorabuena por salir airosa, aunque con sufrimiento, eso no lo descarto, en lo doloroso se encuentra lo mejor cuando se reflexiona y se acepta sin condiciones.

    ResponderEliminar