El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
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domingo, 27 de septiembre de 2015

Impaciente espera

La Escribana del Reino
M. E. Valbuena

Cuarto creciente. Foto Jesús Aguado

Hace un tiempo me pasé muchos días esperando un determinado encuentro. Como este no se producía, me daba a mí misma objetivas y lógicas razones para justificar la espera. Me decía, por ejemplo, que era demasiado pronto para llegar a profundizar y que por ello estaba bien la distancia. En realidad, eso era la trampa de contar hacia atrás: un día más de distancia era uno menos para el encuentro.

O que sería más bonito cuando las flores estuvieran en su apogeo para tener un escenario espléndido. Pero las flores ya estaban en su apogeo y el encuentro no se producía.

Me dije luego que, tal vez, tendría que dar yo pasos más concretos y claros para hacer evidentes las ganas que tenía. Y creo que los di, aunque muy claros no debieron de ser a juzgar por el nulo resultado.

Al final, comida por la ansiedad, desistí de esperar aceptando que un encuentro no se produce si una de las partes no quiere. Acepté lo que había –aunque resultara doloroso para mí– y dejé de esperar.

Entonces, cuando ya no lo esperaba, se produjo el encuentro. Entendí en ese instante que no podía haberse producido en ningún otro momento. Que lo que había que comunicar, sentir y escuchar necesitaba el tiempo de maduración necesario para ser comunicado, sentido y escuchado de esa forma. Aquel encuentro marcó un punto de referencia en mi vida.

Desde ese día, cuando algo se resiste, en vez de esperar ansiosamente me digo que no sería su momento. Y la salud anímica que ese pensamiento me reporta es inmensa.

Tenemos 6 comentarios , introduce el tuyo:

  1. La ansiedad nos come y nos hace quitar la fruta del árbol antes de madurar

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  2. Todo llega a su tiempo. Ni antes ni después.

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  3. Deseo que llegue el momento de no esperar nada ni de nadie, creo que es entonces cuando podrè recibir todo con la manos abiertas y abrazarlo.

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  4. "Cuanto mas larga es la espera mas dulce es el encuentro"
    Esta es la frase que he recordado hoy al leer este blog.

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    Respuestas
    1. No lo diría yo tan tajante. No siempre es dulce el encuentro después de una larga espera.

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  5. Esta situación la estoy viviendo en este momento. Hace días he comenzado el camino de la ACEPTACION, para integrarlo cuanto antes, y sufrir lo menos posible. Pepi

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