Último día y sentíamos que nuestras fuerzas seguían con una intensidad semejante al primer día. Llegamos cada uno de nosotros con nuestros últimos 19.800 segundos por delante para compartir en este día de domingo. Un día interesante, trabajaríamos un hábito que en principio, aunque todos lo reconocíamos, no éramos conscientes del peso que tenía en nuestras vidas, su nombre era “PosponeR”… nos dimos cuenta de lo que tenía que ver todo lo que habíamos descubierto en los días anteriores con ese hábito… ¡Cómo nos manipulamos para PosponeR aquello que nos resulta desagradable!!!… Otra pista para comenzar a hacer cambios positivos en nuestra vida… Ala! A bucear y a hacer fotos: ¡qué posponemos! ¿por qué lo posponemos? ¿cómo nos convencemos para posponerlo?... Increíble, como en las charlas anteriores, en 3.600 segundos de nuestro tiempo otro descubrimiento nuevo, más fotos para nuestro álbum, más pistas para llegar al segundo objetivo del curso “Sentirnos Mejor”.
Con lo que estamos observando y fotografiando mientras buceamos… ¿qué podemos hacer?. Cargados con todas estas fotografías nos fuimos a nuestro grupo de 14… allí no nos costó mostrar las fotos que hablaban de nuestras postergaciones, fotos que incluso nos explicaban o nos decían por qué postergamos, e incluso hubo algún valiente que se vino con la caña para empezar a pescar y tratar de eliminar y/o pintar ese pez que no le gustaba de otro color… entre todos sacamos fotos, unas nos gustaban más que otras… pero lo importante, es que en el ambiente se respiraba ¡EsperanzA! ¡GanaS! ¡IlusióN! y lo que todos valorábamos de nuevo, fue la ¡UnióN! y el ¡Respeto!, sin olvidarnos del “Humor”...
Estas sensaciones fueron puestas en común, con diferentes palabras, cuando nos unimos los dos grupos para, junto con Esther y Mercedes (Presidenta del Teléfono de la Esperanza), hacer una valoración de lo que había supuesto para todos y cada uno de nosotros este Curso… En resumen… fue muy emotivo, cada uno aportamos el pez más vivo que habíamos visto mientras buceábamos, igual no lo habíamos conseguido pescar aún, pero ya sabíamos cuál era el que queríamos pescar…el que nos estaba haciendo la vida más complicada.
Pensad que si un curso de tan sólo 66.600 segundos nos ha permitido darnos cuenta de todos estos descubrimientos, junto con un trabajo personal que llevaremos a cabo en los 479.5200 segundos todo lo visto en el curso, que compartiremos en 5.400 segundos cada semana, unos los lunes y otros los miércoles, que dedicaremos a un tema concreto para poder profundizar en él, así durante 8 semanas…sin duda los beneficios van a ser muchos… ¡¡Ánimo!! “lo mejor está por venir”…
Gracias Geles por tu diario. Y gracias por las fotos donde vemos gente tan sonriente y feliz porque va a empezar a "pensar bien..."
ResponderEliminarEste mensaje es para animar a las dos personas que se perdieron esta experiencia en el último momento pero que apuesto que con el tiempo podrán volver a intentarlo.
Es verdad, la última foto es muy elocuente. ¿Cómo es posible sonreir compartiendo las heridas?. ¿Cómo es posible que de las heridas brote el humor y la sonrisa?. ¿O será que de las lágrimas, del dolor compartido, de las miserias verbalizadas, brota un nuevo rostro, una nueva cara, más real y auténtica?. Gracias Geles.
ResponderEliminarTe felicito Geles. Has hecho un buen recordatorio y de paso nos has dado unas clases, para que nos vayamos animando a cambiar todo aquello que nos hace daño.
ResponderEliminarY no sólo el aprendizaje, tambien las amistades que estamos creando. Ayer por la tarde tuve la satisfación de compartir una chocolatada con personas que eramos del mismo grupo y ahora están en el tuyo e inclusive otras que ya no asisten a ninguno. Y la despedida fue, ¿cuándo nos vamos a volver a reunir?.
¡Nunca pensé que el Teléfono de la Esperanza me fuera a dar tantísimo!
Muchas gracias M.A.P.