El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
Blog
domingo, 3 de febrero de 2013

EL OLMO JAMÁS HA DADO PERAS


Lo sabemos de sobra y sin embargo demasiadas veces seguimos esperando de él un fruto propio de otro árbol. Hasta ahora –salvo posibles experimentos transgénicos que desconozco- las peras sólo las da el peral.

El olmo adorna campos, caminos y plazas, acompaña nuestros paseos, nos da sombra y nos deleita la vista, destacando sobre todo por la calidad de su madera fuerte y resistente. Ha enfermado y ha sido objeto de poesía en boca de Machado. Hasta ahí.

El peral, mucho más enclenque y menos ornamental, proporciona escasa sombra y pobre madera. Pero da peras. Unas mejores que otras.

¿Por qué seguimos esperando que, a nuestro capricho, la naturaleza se distorsione? ¿Por qué no aceptamos al olmo como es, aprovechamos lo que nos da y disfrutamos sin más? ¿Por qué nos empeñamos en pedir lo que no puede dar?

Y lo peor de esta absurda historia es que le cargamos con la culpa de no darnos lo que queremos. Alucinante.

Así, mientras la culpa la tenga el olmo por no dar peras, no cambio mi dirección ni mi pretensión. Y además podré quejarme del pobre resultado, que lo de dar pena tiene muchas compensaciones.

Ojalá fuéramos valientes para llamar a las cosas por su nombre, para ir por aquello que realmente queremos, para luchar y para no sentarnos a esperar (y a exigir) que otros modifiquen su vida para arreglarnos a nosotros la nuestra.

Si queremos peras vayamos al peral. No confundamos la dirección.


La escribana del Reino
M.E.Valbuena

Tenemos 7 comentarios , introduce el tuyo:

  1. Buena lección para seguir aprendiendo.
    Ante las cosas quizá la dirección está más clara pero en cuanto a las personas es más complejo pq siempre esperamos algo incluso cuando decimos que no tenemos expectativa.
    Una vibora sólo puede morder y echarnos su veneno, es su naturaleza.Hay personas que se comportan así y en el fondo se sigue esperando que cambien y buscando su lado bueno pero resulta difícil verlo.Sólo queda separarse o buscar un antídoto.

    ResponderEliminar
  2. A mi me ha pasado que he esperado de amistades y personas que me han rodeado cosas que era imposible que me dieran, cosas que estaban en mi ADN pero no en el suyo. Así me he ido frustrando de relaciones, de expectativas. El problema era yo. Poco a poco me ido dando cuenta... ¿Cómo se he dado cuenta la Escribana?..

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El silencio y la contemplación abren los ojos del entendimiento y de la comprensión.
      La escribana del Reino

      Eliminar
  3. Es dificil separar las expectativas de lo que hacemos por los demas. Despues tambien esta nuestra propia proyeccion en ellos... Todo listo para hacernos daño y culpar al olmo.
    Maria Jose

    ResponderEliminar
  4. Lo de dar pena tiene muchas compensaciones. Estoy totalmente de acuerdo. Hay demasiados lastimeros por ahí.

    ResponderEliminar
  5. Lo autentico y verdadero es conocernos y aceptarnos tal como somos, y así sabeemos hasta donde podemos llegar. Y a los demás no les pediremos aquello que sabemos que no nos pueden dar.
    Pepi desea que paséis un feliz domingo.

    ResponderEliminar
  6. Muchas gracias, "Escribana del Reino" por tu enseñanza. ¡Vaya mundo interior más sabio que tienes!:
    "EL SILENCIO Y LA CONTEMPLACIÓN ABREN LOS OJOS DEL ENTENDIMIENTO Y LA COMPRENSIÓN".
    A Pepi la has dejado alucinada.

    ResponderEliminar