El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
Blog
miércoles, 10 de julio de 2013

COVERSACIONES CON MI MENTE



DONDE HAY CONFIANZA…


Cuando no nos fijamos en lo que sucede a nuestro alrededor permitimos que determinadas situaciones dolorosas queden debidamente “justificadas” con frases hechas (grabadas a fuego en nuestra cultura) que se nos sueltan alegremente tras la “bofetada”. Una de las más manidas es esa de “donde hay confianza da asco”. Y con ella se nos pretende decir que si las personas de nuestro entorno nos gritan, nos tratan con desprecio o nos infravaloran, no lo hacen a propósito, faltaría más… lo hacen (¡hay que fastidiarse con la frasecita!) porque NOS QUIEREN. Y lo peor de todo es que, llevamos tan grabado en nuestra cabeza este absurdo, que hasta nos lo creemos a pies juntillas. Además, para rematar la faena, existe esa otra bonita frase de: “quien bien te quiere te hará llorar”. Así, con sentencias de tan ilustrada sabiduría, dejamos que nuestra dignidad como personas se vaya erosionando poco a poco a medida que vamos recibiendo tantas y tan exquisitas muestras de “cariño”.

Me costó muchísimo darme cuenta de estas “pequeñeces”. Me costó mucho entender que la persona que me grita, aunque sea de vez en cuando y que pretende infravalorarme con comentarios hirientes no me quiere. Y si, según no se sabe qué escala de medida de los afectos, en verdad me quiere, prefiero que no lo haga, parafraseando otro dicho, esta vez más cierto y aconsejable (¿será por eso tan poco conocido?): “no me quieras tanto: quiéreme mejor”.

A nadie le gusta que le hagan daño; que le dirijan tonos de voz hirientes, mordaces u ofensivos. A nadie le gusta que le traten con desprecio. Por eso, dichos como los dos primeros que señalé sobran. La confianza no puede dar asco. La verdadera confianza da tranquilidad y bienestar, al saber que las personas pueden compartir su tiempo, sus alegrías y sus dolores. La verdadera confianza se da entre iguales. La otra, esa que tanto bendicen quienes la defienden, se da en vertical; entre quien se cree superior y disfruta maltratando a los otros, y quien se siente inferior y maltratado.

Cuando descubrí la perversión oculta en estas frases decidí no volver a consentirlas, ni en los otros ni en mí misma, pues lo terrible de estos reductos del subconsciente es que también lo hacemos nosotros mismos y se necesita un gran ejercicio de atención para darse cuenta, evitando comportarnos con los más cercanos de una forma tan ruin. Y mientras aprendo, he decidido no aceptar más abusos, asumiendo que, en casos de extrema tozudez, a lo mejor hay que pasar de largo por una relación. Al principio puede resultar doloroso, pero quien te quiere bien, de verdad, no te humilla, ni te insulta, ni te infravalora.

Quien bien te quiere, te respeta, te valora y te lo demuestra.

Mª José Calvo Brasa

Tenemos 6 comentarios , introduce el tuyo:

  1. Estoy de acuerdo Mª. José: "Y mientras aprendo, he decidido no aceptar más abusos, asumiendo que, en casos de extrema tozudez, a lo mejor hay que pasar de largo por una relación. Al principio puede resultar doloroso, pero quien te quiere bien, de verdad, no te humilla, ni te insulta, ni te infravalora".
    Me uno a tus reflexiones

    ResponderEliminar
  2. ¡Vaya alegria para comenzar el día!: Quien bien te quiere, te respeta, te valora y te lo demuestra.
    A Pepi una vez más este maravilloso blog por todas las enseñanzas que conllevan le está indicando lo bien que actuó cuando tuvo que decir definitivamente a un hermano por el MALTRATO recibido: "Tú tu vida y yo la mía", (después de darle oportunidades para seguir la relación), pero lo que recibía en ese intento, era mayor maltrato.
    Y distanciándose de Él: Pepi se quiso, se valoró, y se lo demostró, porque fue lo mejor que hizo para su salud emocional, y el desarrollo de su vida. Ya era una persona TOXICA para ELLA.

    ResponderEliminar
  3. Habeces nosotros mismos no nos queremos y por consiguiente no nos valoramos y lo trasmitimos hacia los demás, por lo que es muy importante tener confianza en uno mismo. Me ha encantado tu reflexiòn Mª José.
    Elena.

    ResponderEliminar
  4. Atineda reflexión. A todos, a mí me viene muy bien, Estamos acostumbrados a desvalorizar con palabras y actitudes a quienes tenemos más cerca, a quienes más queremos...y esa es una actitud que hay que corregir cuanto antes. Quien te quiere te respeta, te valora, te anima, te ama. Lo demás, no se entiende. Norecic

    ResponderEliminar
  5. Un reflexión de diez, redonda, completa. Ya está registrada esta enseñanza de hoy, Mª José. Gracias.
    Juanín.

    ResponderEliminar