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pero el que recibe nunca debe olvidar
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domingo, 14 de abril de 2013

LA ESCRIBANA DEL REINO



- Las juntas de los azulejos -

Me cuentan de una compañera que está mal, que apenas habla, que no se relaciona con nadie, que vive encerrada en sí misma y en sus múltiples dolencias (unas reales y otras imaginarias), que seguramente esté viviendo una depresión…

No me extraña nada. Es más bien esperable. No la conozco demasiado ni me puedo considerar su amiga, pero cuando pienso en ella el recuerdo que me sale es muy significativo y dice mucho de su carácter.

Un día, hace ya tiempo, una compañera nos invitó a tomar café a su casa. Orgullosa, nos mostró su hogar y los muchos detalles que tenía de los numerosos viajes realizados. Como suele ocurrir, unos nos gustaron y otros no, lo mismo que la prolija decoración.

Después, también como suele ocurrir, hubo comentarios de todo tipo. Pero el que más me llamó la atención fue el que hizo la compañera que ha propiciado este escrito. Ella se había fijado en que las juntas de los azulejos estaban negras. Jamás hasta ese momento me había yo fijado en tal detalle (y me tengo por observadora). Desde aquel día ella va unida al comentario que hizo y que a mí me dio mucho que pensar.

La verdad es que, si entre tanto en lo que fijarse, una destaca un hecho como ese, no hace falta ser muy lista para deducir que esa mujer tiene especial intención por fijarse en los aspectos más negativos que encuentre en su vida, por nimios que sean. Y, ya se sabe, si buscas algo lo acabas encontrando. Buscando defectos, se encontrarán defectos.

Por lógica, una trayectoria como esa acaba en una situación como la que está viviendo ahora. De ahí que no me extrañe. Porque es de cajón que si sólo descubro y me centro en negatividades yo misma acabaré siendo una más.

M.E.Valbuena

Tenemos 5 comentarios , introduce el tuyo:

  1. "Si buscas algo lo acabas encontrando". Luego, por hábito, acabamos encontrando aunque no busquemos.

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  2. ¡Anda que no hay cosas para fijarse en una casa que no sean los azulejos!

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    Respuestas
    1. Ni siquiera se fijó en los azulejos. ¡Se fijó en las JUNTAS de los azulejos! Está claro que si queremos complicarnos lo conseguimos.

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  3. Escribana, puedes decirle a esa persona que se pase por el T.E., seguro que en vez de fijarse en las justas de los azulejos, empieza a fijarse en el propio azulejo y luego, poco a poco en el resto de la cocina y por último en la amabilidad de su anfitriona.
    Elena.

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  4. ¿Por qué hay que interpretar que esa persona está mal?, puede decirse que es su gusto.
    Y mucho más interesante me parece que se hubieran quedado con el contenido de la reunión. Pepi





























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