El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
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sábado, 1 de febrero de 2014

EL RINCÓN DEL OPTIMISTA


Nunca se quejaron las rosas por llover a cántaros
Si llueve, que llueva

De un tiempo a esta parte noto que no me molesta tanto como antes que haga mal tiempo: viento, lluvia, nieve, niebla… Y a pesar de mis catarros me importa poco que llueva sobre mi cabeza desde que descubrí el vídeo promocional de una conocida cadena gallega de supermercados donde una señora cuenta lo poco que le preocupa que llueva, más en Galicia, su tierra del alma. La grabación está en gallego, pero se entiende. Hay tantas cosas que celebrar, que no merece la pena enfadarse sólo por que llueva. En estas zonas del norte de España o de Inglaterra, por ejemplo, sería para deprimirse por la cantidad de días nublados o de lluvia de hay y, sin embargo, esto no ocurre o puede que la gente simplemente sea un poco más triste y melancólica que la del sur, donde el sol lo envuelve casi todo. Puede que sí. Pero yo comulgo con el refrán de ‘A mal tiempo, buena cara’. Y si encima pensamos que el agua es vida, que todos los seres necesitamos del agua para vivir, para crecer, un regalo que nos viene del cielo… Sí, ya sé que el granizo, los rayos y huracanes también vienen del cielo, pero hemos quedado que vamos a pensar en positivo, ¿no? ¿Alguien recuerda la escena central de la película ‘Cantando bajo la lluvia’? No se trata de coger una pulmonía, no, pero ese film encierra el mensaje al que me refiero.

Relacionado con la lluvia escuché el otro día una entrevista de un joven empresario (ahora se les llama emprendedores) que había sacado a la venta por Internet unos paraguas de la felicidad, de colores vivos y con mensajes para alegrar el espíritu. El mensaje principal de esta página es “porque la lluvia no es la culpable del mal humor de las personas”.

En resumen, cuando haga mal tiempo sal a la calle, piensa que el agua es vida, coge un paraguas alegre y, si hace falta, canturrea algo (los pájaros no dejan de cantar ni de comer porque haga mal día), que se note y que te noten que un chaparroncito no te va a estropear el día.

Asín sea.
Juan.

Tenemos 3 comentarios , introduce el tuyo:

  1. Lo que importa ES LO QUE VIENE DE DENTRO, ¿o no?

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  2. Vaya jarrón de optimismo para este sábado, "que no se nos nuble nunca nuestra alegría" y dejar que la lluvia nos empape enteros.
    Elena.

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  3. Hay que saber disfrutar de lo que se nos presenta en cada momento, hasta de la climatología. Pepi tiene la autoestima hasta más elevada con los días nublados y con lluvia, nieve, granizo......

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