El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
Blog
domingo, 5 de mayo de 2013

LA ESCRIBANA DEL REINO


muñecas

- La maternidad en tiempos difíciles -

Ser madre es un asunto serio. Muy serio. Puede incluso que sea el más serio de todos los asuntos que nos planteemos en nuestra vida.

Decidir tener un hijo, criarlo, educarlo y hacer de él una persona buena e íntegra es una gran responsabilidad que, a veces, ni queremos pensar por temor a no tomar tal decisión.

Las madres de hoy fuimos hijas, y nietas, y biznietas… y hemos podido comprobar cómo cada generación salió adelante respondiendo a las necesidades de su tiempo. Si en épocas pasadas lo fundamental para la madre era cubrir las necesidades físicas de sus hijos, hoy, afortunadamente, en nuestra sociedad, las necesidades básicas no son gran problema. Nuestros hijos han crecido, la mayoría, sin preocuparse por qué comer, qué vestir, dónde vivir, qué decidir… Sus interrogantes son otros.

Las madres, que damos vida, tenemos también que enseñar a vivir.

Y esto es lo complicado. ¿Cómo transmitir esperanza, ilusión, fuerza vital, serenidad y paciencia a los hijos si nos cuesta hallar todo esto en nosotras mismas? ¿Cómo dar sentido a una vida si no encontramos el de la nuestra? ¿Cómo enseñar a ver oportunidades cuando sólo apreciamos fracasos y crisis? ¿Hablar del futuro? Mejor ni mirar.

Hoy, festividad comercial de la maternidad, aprovechemos la ocasión para replantearnos y valorar nuestro papel en la Historia. Agradezcamos a nuestras madres su aportación en su tiempo y asumamos nuestra responsabilidad en el nuestro.

Este es el reto: Somos portadoras de vida. Seamos también portadoras de VIDA.

M.E.Valbuena

Tenemos 5 comentarios , introduce el tuyo:

  1. Bonita reflexión de La Escribana. Pongamos sentido común, dejemos que el corazón d ecada madre hable. Desde ahí es cómo seremos capaces de transmitir VIDA. Yo soy madre y se cómo dejar que el corazón se abra, no hay ningún momento donde mis hijos no estén dentro de mí, porque forman parte de mi misma naturaleza, aunque sus actos puedan no gustarme. Cariño, abrazos, miradas, pasos de la mano,...ese es el camino. Brindo por mi madre, y por todas las madres del mundo. María.

    ResponderEliminar
  2. Amo a mi madre, participo de su misma vida, hoy le daré un achuchón más fuerte. Epicteto

    ResponderEliminar
  3. Gracias pòr todo lo recibido gratuitamente

    ResponderEliminar
  4. Gracias mamá por todo lo que hiciste por mí. Sin duda, lo mejor que supiste. Gracias por tus errores que a mí me han hecho aprender también. Gracias porque soy como soy gracias a tí.

    ResponderEliminar
  5. No soy madre, pero educar a un hijo me parece bastante complicado, porque bajo mi pensamiento, y considero que en las madres bajo sus sentimientos principalmente, influyen varias situaciones: una como es el hijo, otra lo que las madres desean para Él, y 3º el ambiente familiar, escolar y social en el que se desarrolla. Pepi


    ResponderEliminar