El que da, no debe volver a acordarse;
pero el que recibe nunca debe olvidar
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domingo, 12 de mayo de 2013

LA ESCRIBANA DEL REINO



- A ritmo de bolero -

Hay personas que van por la vida a ritmo de bolero.

No digo que los boleros no sean bonitos, románticos y agradables de bailar. Sobre todo si la pareja es la adecuada y el sitio acogedor. Pero la letra, en la mayoría de los casos, está plagada de irracionalidades y falsas creencias que, si no tenemos cuidado, acabamos por interiorizar.

Por ejemplo: amamos intensamente siempre que nos enamoramos, no “solamente una vez”; Yo sin ti sigo siendo yo –aunque sola- no “sin tu amor no soy nada”; Las mujeres somos compañeras, parejas, amigas, amantes… no “muñequitas lindas”; el amor ha de ser liberador y el cariño acogedor, no “un castigo”; El día que me quieras lo celebraré y estaré feliz, pero “las campanas dirán que ya eres mía” no se cumplirá, porque nadie es propiedad de nadie. Supongo que Dios tendrá otras cosas que hacer que “hacerme quererte, para hacerme sufrir más”. Y mi religión, si la tengo, no será “adorarte”.

Y así podríamos seguir.

He conocido a personas que, aferradas a este tipo de ideas y a creencias similares, se niegan a olvidar un pasado (seguramente no tan perfecto como lo pintan) y renuncian a vivir un presente que no les interesa. Cierran los ojos, los oídos y los sentimientos a todo lo que no sea el recuerdo y la añoranza del ser querido que un día les dejó. Y con ello están cerrando toda posibilidad de curación y de superación personal.

Existen boleros, sí. Pero también salsa, merengue, vals, cha-cha-cha, rock and roll, tango…

M.E.Valbuena

Tenemos 4 comentarios , introduce el tuyo:

  1. No había caido en la cuenta, pero es verdad que los boleros hablan de un amor que deja tanto que desear que ya no sé si es amor o "posesión, necesidad, cárcel, propiedad, tortura, egoísmo, locura, insensatez..". Mejor no seguir. ¿Por qué engolosinarán tanto?. ¿Me lo puedo explicar alguien?

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    1. ¿Será porque el drama vende más que la felicidad y la tragedia más que la serenidad?

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  2. Una de las primeras lecciones que teníamos que recibir desde pequeños es: que nada es eterno, todo pasajero, y saber disfrutar de las cosas, y compartir con las personas mientras forman parte de nuestra vida; así el día que las perdiéramos, la aceptación no sería tan difícil, y dolorosa, y sabríamos pasar página, y pensar que en la vida hay nuevas cosas y personas con las que podemos vivir nuevas experiencias, y que el mundo por eso no se termina. Pepi.

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  3. Buen artículo, Escribana, especialmente la frase de que no amamos solo una vez sino que amamos siempre,y así lo siento yo también, porque el amor es el mismo, lo que es distinto es la manera de experimentarlo,de ahí que dé igual amar a tu familia,veciino,amigo... el amor es uno.

    Otra apreciación es la de ver a las mujeres como "muñequitas",como juguetes para disfrutar, "lindos",articulables, en propiedad, que no son libres, sino esclavas de complacer deseos ajenos, como si tuvieran que cumplir algún castigo siendo propiedad y no dueñas de su propia vida.Las campanas dirán que te quiero, pero no que me convierto en tu esclava ni en dueña de tu vida; somos libres para querernos y también para no querernos, sobre todo si no hay amor.

    Y finalmente aplaudo la amplitud de miras que tienes en el baile, como suele decirse: en la variedad está el gusto; un bolero es bonito, una rumba ... incluso una saeta bien bailada con estilo sevillano, pero... no quiero cantar ni puedo a ese Jesús del madero, sino al que anduvo en la mar.

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