SIGO APRENDIENDO PARA SEGUIR CRECIENDO

Del 29 de Septiembre al 2 de Octubre asistí al curso de "CRECIMIENTO PERSONAL" , en Villagarcía de Campos (Valladolid).Eramos de León, Salamanca y Valladolid; en total 18 y 5 coordinadores que fueron los que llevaron a cabo el desarrollo del curso.

Antes de asistir al mismo, me había preguntado varias veces, ¿de qué tratará?. Me han enseñado a quererme, valorarme, aceptarme como soy, a escuchar, a pensar bien para sentirme mejor, no posponer, a ocuparme de los problemas, a conocer mi guión de vida, etc. etc. ,¿qué más me enseñaran y tendré que cambiar?.

Cuando nos íbamos encontrado, coordinadores y compañeros, fue de una gran efusividad con abrazos y besos muy entrañables, percibí que teníamos una gran satisfacción por volvernos a encontrar.

A las 18,30 comenzó el curso, iniciándolo María Guerrero, con su presencia acompañada como siempre, de su sonrisa tan dulce y agradable. Después de hacer su presentación, nos formuló las siguientes preguntas: ¿qué expectativas teníamos para este curso?, ¿con que finalidad veníamos?, ¿que creíamos que íbamos a conseguir? Y que sentimiento teníamos en ese momento.

Mi respuesta fue: seguir conociéndome, aceptándome como soy y continuar por el nuevo camino, para seguir cambiando mi guión de vida. Mi sentimiento era de felicidad.

OBJETIVOS DEL CURSO PARA MARIA GUERRERO

Cambiar aquellas partes de mí, de las que he tomado conciencia, a través de dos pasos: 1º).- Apropiarnos de nuestra propia responsabilidad, que somos los únicos responsables de nuestras vidas, porque ya va siendo hora "de dejar de echar balones fuera", y 2º).- Que somos seres hechos para transmitirnos y proyectarnos, porque lo que cada uno hacemos, lo proyectamos en los demás.

Para conseguir los objetivos María Guerrero centro sus charlas:

- En la Reestructuración : que es cambiar el marco conceptual o emocional en el cual el paciente se encuentra y

-En la Personalización, es darme cuenta de mis problemas porque si yo quiero puedo.

A lo largo de estos días del curso sus explicaciones fueron muy interesantes, concretas y concisas. Su finalidad era hacernos ver, que cuando sentimos que no vamos por buen camino, debemos de efectuar el CAMBIO, por muy duro que sea. Y que tenemos que tener en cuenta que: "CADA UNO ES LO QUE ES MAS LO QUE PUEDE LLEGAR A SER". Yendo en la misma línea al dar sus charlas, el Presidente y Coordinadora del Teléfono de la Esperanza en Salamanca.

 

María Guerrero, nos hizo muchas, y extraordinarias DINAMICAS, con la finalidad de que viéramos nuestros comportamientos, hasta qué grado nos conocemos, si los errores que cometemos nos enfrentamos para resolverlos y de qué manera, hasta donde llega el grado de nuestra responsabilidad o irresponsabilidad, si perdonamos etc. etc.

La dinámica que me resultó muy especial fue la del PERDON. Para realizarla el salón lo acondicionaron como que era una iglesia: con el altar, velas, flores, un brasero encendido, luz tenue,(estaba anocheciendo) y una música celestial. Fuimos entrando de uno en uno creando un silencio sepulcral, y nos fuimos quedando de pie, en nuestro sitio, hasta que María Guerrero nos mandó sentar y repartió un papel con las siguientes preguntas, para contestar por escrito: 1º ¿Qué resentimientos tengo que me hacen daño y necesito eliminar?, y 2º ¿A quién quiero perdonar? Después el que quería hacer el acto del perdón, se ponía de pie delante de todos, leía lo que había escrito y lo quemaba en el brasero.

Ante esta dinámica yo me emocioné mucho, pues el resentimiento que tenia y quería eliminar era: la falta de entendimiento que he tenido con mi madre, y después la perdoné a ella y me perdone a mí; pues me he dado cuenta, que como yo no me conocía, a ella tampoco, y siempre he responsabilizado a mi madre de nuestra difícil relación, y ahora veo que yo también he sido responsable, y lloré amargamente porque está bastante enferma, y después de casi toda una vida, es cuando ya entiendo su rigidez, dominancia, falta de cariño etc.etc. y me dio mucha pena al recordar, todo lo que ambas hemos sufrido.

También hubo reuniones de GRUPOS PEQUEÑOS, que como siempre resultaron muy beneficiosos.

Mis reflexiones y recuerdos al volver a León:

Parte de este curso, me encuentro que tengo bastante camino recorrido, pues cuando me diagnosticaron la depresión, yo solo fui a la psiquiatra, para hacer una reestructuración y un cambio en mi persona.

El acto del Perdón, me dio mucha paz.

Con los coordinadores y compañeros he vivido una relación, como nunca en mi vida y por eso digo que fué: "EL NO VA MAS DE LAS ESTRELLAS"; compartiendo continuamente momentos de alegría, tristeza, de escucha, de ayuda, etc.etc.etc.

Debo tener presente la frase que me dijo Vicky: " Si das cariño, no puedes pensar que estás haciendo daño".

Voy a seguir siendo un gran luchador.

Me resultó emocionante, que se hiciera un recuerdo especial a Juan (compañero fallecido de cáncer).

María Guerrero, es de una sensibilidad especial, qué poesía más bonita ha hecho como homenaje a Serafín Madrid, en el 40º aniversario de la fundación del Teléfono de la Esperanza. Nos mando ponernos de pie, en círculo, y a cada uno nos dio un trozo de la poesía numerada, para que la fuéramos leyendo, y a mí me tocó el que escribo a continuación: "Manos que vuelan, manos que andan, respetando el ritmo, de la propia danza".

Me pareció bonito detalle y la risa que pasamos.Ya era sábado y nadie había llegado tarde a las charlas y por consiguiente no se había pagado los dos euros, ni recibido el aplauso; entonces Angelines de Salamanca, tuvo la feliz idea de proponer llegar todos tarde a la siguiente charla, entrando de uno en uno e ir dejando en la hucha los dos euros. Así lo hicimos y los coordinadores se preguntaban ¿por qué no entrarán? y cuando decidimos entrar, hicimos lo acordado. Todos nos partimos de risa, Alfredo nos puso la hucha y los demás coordinadores nos aplaudieron.

Me ha parecido un curso muy interesante. Como siempre muy bien organizado; tanto en emplazamiento, alojamientos, organización de horarios etc.

Desde aquí mi agradecimiento a los coordinadores, que han trabajado sin descanso para que nosotros recogiéramos el mayor fruto posible, con un trato excepcional.

Y para todas aquellas personas que no hayan hecho este curso, piensen que lo deben tener en mente para realizarlo algún día.

Un participante del curso. Con cariño

 

Gracias amigo anónimo por estas vivencias entrañables. De ellas aprendemos los demás.