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| Empezando la marcha en Aviados |
El tiempo se anunciaba propicio: el calor no sería excesivo y no se esperaban precipitaciones importantes. La jornada comenzó a las 9,30 horas para coger el autobús que nos llevaría al conocido tren de FEVE. Enseguida surgieron los imprevistos llemados "fevenomanías", que son acontecimientos inesperados que provocan cambios inesperados en las personas, como, una reunión urgente en Madrid del Teléfono de la Esperanza, una actuación de teatro, un concierto no señalado, un impertinente dolor de muelas y más que ahora no nos acordamos. Estas fevenomanías hicieron que el grupo fuera menos numeroso del esperado, pero sin reducir la calidad.
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| La subida tenía su dificultad |
La dificultad de las subidas para algunas personas fue más que mediana, pero el grupo supo esperar, hasta que los regazados engarzaban con los demás y acompasaban sus agitadas respiraciones. En mitad de un circo glacial que la naturaleza había dispuesto para todos nosotros nos permitimos disfrutar de su silencio y de su armonía, de forma tranquila y consciente. Que parecía que nos hacíamos uno con tanta belleza natural y tanto equilibrio
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| Esperando a los rezagados |
La Valdorria nos recibió con los brazos abiertos y no digamos la Ermita de San Froilán, con sus cientos de escalones. A los pies del santo cada uno dejó sus plegarias, sus deseos y sus dudas. Que sean atendidas y escuchadas y un cielo ponga un poco a nuestro empeño y tesón.
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| Hay tiempo para posar con la peña Galicia al fondo |
El camino de regreso lo indicaba el pueblo de la Mata y la vista de todo un valle verde, amplio, luminoso. Allí nos detuvimos a que nuestra mirada descansase en el paisaje y aprendiéramos el importante arte de la contemplación, ese arte tan necesario para una vida interior saludable.
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| En lo más alto |
Los pequeños grupos de tres en tres personas nos ayudaron a que cada un ampliara un porquito más su corazón y se llenara de nuevos nombres, recuerdos, emociones e historias. ¡Qué grande es lo que se esconde dentro de cada persona y qué hermoso!.
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| En la ermita de San Froilán |
Algunos se emocionaron al escuchar la gran labor que viene realizando el Teléfono de la Esperanza y cómo a un grupo cada vez más grande de personas ha ayudado a cambiar su vida, llenándola de sentido, de valores y de alegría.
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| Preciosa naturaleza, grandes personas |
QUE GRANDE ES CAMINAR JUNTOS EN UNA MISMA DIRECCION Y SINTIENDONOS COMPAÑEROS DE CAMINO
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| De despedida, bonita pose y belleza en la naturaleza |
Hasta la siguiente marcha............
Os felicito a los que pudisteis con esta marcha.
ResponderEliminarPepi queria haberla compartido, pero era mucho para ella.La costo renunciar porque la convivencia la apetecia mucho. Pero hay que aceptar las limitaciones.
Aplausos, muchos aplausos, a todos los participantes.
Nos recibió una naturaleza en todo su esplendor. Un encuentro formidable.
ResponderEliminarHa sido un dia muy especial , el tiempo nos acompaño y no hizo mucho calor,la explosion de colorido en los campos algo que te deja sin palabras,para solo disfrutar el momento,todo ello dentro de un ambiente de amistad,alegria,complicidad,con momentos especiales,como los 10 minutos para dejarnos llenar por la serenidad y energia que se podia experimentar en la base de Peña GAlicia,agradecer a los organizadores el trabajo realizado.un abrazo de oso
ResponderEliminarA sido un dia espectacular estoy deseando que llege la siguiente para poder volver
ResponderEliminarHe montado un video con las fotos que hice, algunas que me han enviado un par de compañeras (gracias, Mercedes y Pilar) y otras tomadas del blog (espero que no os importe). He intentado ponerlas cronológicamente pero de algunas no tengo información horaria y puede que esten fuera de sitio. Espero que os guste.
ResponderEliminarhttp://youtu.be/UDijeZ3_C4U
Angel (el de la gorra verde) :)
Muy bonito el video.
EliminarGracias, Angel
¿Qué pasó con el perro o perra que sólo aparece en la primera foto?
ResponderEliminar¿Sólo tuvisteis 10 minutos especiales de descanso? UAUHHHHH!!! ¡Qué marcha!
Tenéis unas caras de felicidad que da gloria veros, bueno andáis cerca, por las alturas, je, je.
Algunas fotos del vídeo son muy bonitas. Me gusta la penúltima con el riachuelo y los árboles haciendo sendero y otra en la que se ve un camino estrechito entre montañas, aunque todas ellas hacen un conjunto formidable. Enhorabuena al fotógrafo y a los/as fotografiados/as. ¡Qué buena percha tenéis!
Sigo preguntándome dónde andaba el perrito o perrita, pero por hoy no busco más. Hasta mañanita ita ita.
El perrito se ve en la foto nº3 entre las piernas de uno del nique a rayas...
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